El ecosistema de pagos sigue expandiéndose en el país, impulsado por el crecimiento de las transacciones digitales y la diversificación de herramientas financieras. De acuerdo con el informe mensual de la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (ABIF), basado en cifras de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), entre noviembre de 2023 y octubre de 2024 se registraron transacciones por un total de US$ 195 mil millones.
«El crecimiento sostenido de las transferencias electrónicas y el avance en la digitalización de los pagos son señales claras de que los usuarios buscan rapidez y seguridad en sus operaciones», explicó Christian Montesdeoca, cofundador de Kuvasz Solutions.
El documento indica que el monto total transado creció 7,8% en términos reales respecto al período anterior, reflejando un incremento significativo en el uso de medios electrónicos. En particular, las Transferencias Electrónicas de Fondos (TEF) experimentaron un alza del 16,9%, mientras que los pagos con tarjetas de crédito y débito aumentaron 5,7% y 5,4%, respectivamente. Paralelamente, la cantidad de cuentas bancarias activas alcanzó los 37,9 millones, lo que representa un alza del 8,9% en un año, con un crecimiento relevante de las cuentas corrientes digitales.
Transformaciones y regulaciones en 2024
Durante el último año, el sector de medios de pago ha experimentado una serie de cambios impulsados por nuevas regulaciones y la entrada de actores emergentes. «Las nuevas regulaciones están definiendo un marco más robusto para el ecosistema financiero digital, y las empresas deben estar preparadas para integrarse sin fricciones, asegurando un desarrollo sostenible y ordenado», señaló Montesdeoca.
En este contexto, la tecnología ha sido una aliada fundamental en la evolución del sector. La incorporación de herramientas basadas en análisis de datos ha permitido mejorar la detección de fraudes, personalizar servicios y optimizar la experiencia de los usuarios.
Perspectivas para 2025
De cara al próximo año, se espera la consolidación de los cambios regulatorios y tecnológicos en el sector financiero. Montesdeoca enfatizó la importancia de adaptar la industria a los estándares más exigentes. «Las empresas deben enfocarse en generar confianza en los usuarios, garantizando procesos ágiles, seguros y alineados con las regulaciones vigentes», puntualizó.