Fuente: BBVA
La pandemia ha modificado la forma en la que compramos y pagamos. Nuevas fórmulas, como las tiendas sin cajas o los pagos a través del Internet de las Cosas (IoT), ganan terreno. La aceleración e innovación en la forma de pagar es uno de los grandes avances del último año y ha provocado cambios reales. Así lo refleja el informe ‘Key Trends to Drive Your Payments Strategy’, elaborado por JP Morgan.
En junio de 2020, Satya Nadella, CEO de Microsoft, dijo una de las frases que ha sido premonitoria respecto a los procesos de digitalización desde que empezó la pandemia: “Hemos visto dos años de transformación digital en dos meses”. Así ha sido para muchos pequeños y medianos comercios, que han visto cómo la transformación digital de sus negocios era imperiosa. Pero sobre todo han debido actualizar sus métodos de pago a esta nueva época.
La innovación en los métodos de pago está en constante cambio y de esto trata el informe ‘Key Trends to Drive Your Payments Strategy’ (Tendencias clave para llevar a cabo tu estrategia de pagos), publicado por el banco estadounidense JP Morgan. En él se reúnen algunas de las grandes novedades en el sector de los pagos que veremos implementadas en un futuro próximo.
‘Payment in context’: redes sociales e Internet de las Cosas (IoT)
Comprar y pagar mientras hacemos otras cosas. El ‘payment in context’ nos permitirá comprar y pagar sin estar conectados a una tienda ‘online’. Podremos hacerlo mientras navegamos en una red social (adquirir el vestido de la ‘instagrammer’ que seguimos) o mientras conducimos (comprar un café solo con la voz y pasar a recogerlo diez minutos después).
“La idea de que el proceso de pago es una acción más de la compra ya ha pasado de moda. Ahora se busca que este proceso pase desapercibido”, matizan desde JP Morgan. Facebook ya ha empezado a probar esta tendencia a través de sus tres plataformas (Facebook, Whatsapp e Instagram), donde permite habilitar tiendas y catálogos.
BBVA tiene en marcha varias iniciativas para integrar los procesos de pagos en plataformas de terceros y lograr una experiencia más ágil y sin fricciones para el cliente. Uno de ellos es el que se está desarrollando con Ant Group (filial de Alibaba). El acuerdo firmado va a permitir que BBVA España y BBVA México incorporen sus servicios de financiación y pagos transfronterizos en la plataforma de comercio exterior Trusple. El objetivo es que los importadores de España y México puedan agilizar sus operaciones internacionales, ya que pueden pagar dentro del propio Trusple sus compras en China sin tener que usar servicios externos.
Pagos más rápidos, simples y seguros
Lo demandan los usuarios y los comerciantes: los pagos ‘online’ deben ser más rápidos, simples y seguros. Los comercios buscan soluciones para agrupar en un solo espacio todas las posibilidades y el papel de los bancos es proporcionar esas opciones. BBVA, por ejemplo, lleva años innovando en diferentes formas de recibir y entregar pagos. Lo ha hecho con la apertura de sus servicios en el API Market, que pone a disposición de terceros herramientas de pago de la entidad, para servir a clientes de España y Latinoamérica.
En este ámbito destaca también Bizum, la plataforma de pagos ‘online’ que permite enviar y recibir dinero entre clientes de diferentes bancos a través del móvil. No se necesita conocer el número de cuenta, tan solo elegir el contacto desde la agenda. Desde el pasado mes de marzo, BBVA permite a sus clientes pagar en comercios ‘online’ con Bizum, de una forma rápida, cómoda y segura a través del número del móvil.
Otra apuesta del banco ha sido por los pagos internacionales a través de los protocolos SWIFT, que permiten las transferencias entre bancos de diferentes países. BBVA se ha integrado en una iniciativa para que las transferencias SWIFT sean aún más rápidas y seguras.
Son fórmulas que se acercan a las demandas de los usuarios, de rapidez, comodidad y, por supuesto, seguridad. Una de las recomendaciones del informe de JP Morgan es que los negocios abracen las formas de pago que usan sus clientes. Otro informe, en este caso de la consultora McKinsey, analizaba cómo durante el año 2020 alrededor de dos tercios de los habitantes de las 13 mayores economías del mundo (incluidas Estados Unidos, España y México) realizaron compras digitales durante los dos primeros meses de la pandemia.
Precisamente en 2020, más de 2.000 comercios españoles clientes de BBVA se dieron de alta en Paygold, una solución que permite cobrar a través de un enlace aunque no se tenga tienda virtual. Esto supuso un aumento de un 260% con respecto a 2019. Un claro aviso de cómo pymes y autónomos están adaptándose a gran velocidad a los nuevos hábitos de compra de sus clientes, que en muchas ocasiones pasan por nuevas formas de pago.
Compra sin pasar por caja
Una vez que el pago sin contacto o ‘contactless’ ha sido asumido por la mayoría de comercios físicos, el siguiente paso es la compra sin cajero. Tan sencillo como entrar en una tienda, registrar el código QR del establecimiento en nuestro móvil, coger los productos que deseamos, aceptar el pago y salir. Todo ha quedado monitoreado por cámaras que han detectado los productos y los han subido a nuestra cesta virtual.
Un servicio en el que fue pionero Amazon con servicios como Amazon Go y Amazon Fresh, y que también han adoptado otras grandes marcas como Zara, Repsol o Continente. El informe ‘Key Trends to Drive Your Payments Strategy’ ilustra con claridad un escenario donde esta tecnología se popularice. Aunque aún existen diferentes enfoques para permitir esta ausencia de cajeros, se cree que en solo unos años se podría alcanzar una experiencia completamente automatizada.
