Fuente: www.tynmagazine.com
Por: Jordi Botifoll, Presidente de Cisco América Latina y vicepresidente sénior de las Américas.
Latinoamérica está adoptando la transformación digital en los sectores público y privado porque es la manera de mantenerse compitiendo en el mercado económico mundial. Sin embargo, la transformación digital es imposible si no se hace de la ciberseguridad una prioridad.
Actualmente se registran cerca de 20 mil millones de ataques diarios a escala mundial, según Talos, el grupo de inteligencia de amenazas de Cisco. Por otra parte, las tendencias perturbadoras destacadas en el Informe Anual de Ciberseguridad de Cisco 2018 presentan la necesidad de contar con una fuerza laboral recién formada, que comprenda cómo defenderse de los ciberdelincuentes en un entorno de seguridad que cambia rápidamente.
Hoy, la tecnología es parte de todo lo que hacemos y el Internet de las Cosas (IoT por sus siglas en inglés) ofrece mayor seguridad a nuestras vidas y también facilita las cosas para los ciudadanos latinoamericanos. La ciberseguridad, sin embargo, sigue siendo una importante preocupación para la región.
Desde la ciudad de Panamá hasta Río de Janeiro, las ciudades de toda América Latina usan IoT para mejorar las vidas de sus ciudadanos. Los sensores en México ahora advierten de las fugas de gas antes de que se vuelvan peligrosas. La tecnología inteligente está en todas partes, lo que permite a las organizaciones de la ciudad alertar de forma proactiva a las personas sobre las condiciones del tránsito, las inclemencias del clima y otros peligros.
Sin embargo, a medida que más sensores y dispositivos están conectados a Internet, los ciberdelincuentes tienen mayores oportunidades de atacar. Los botnets de IoT tienen la capacidad de comprometer y aprovechar miles de estos dispositivos para causar estragos. Según el Informe Anual de Ciberseguridad de Cisco de 2018, el 42% de las organizaciones experimentaron este tipo de ataque en 2017.
IoT es solo una de las áreas que el Informe de Ciberseguridad recomienda prestar especial atención, al diseñar políticas de seguridad y capacitar al personal de seguridad. La nube también está creciendo en popularidad, lo que implica riesgos y recompensas. La recompensa es una mejor protección a través de la seguridad de los datos, pero el riesgo es que es más difícil de defender.
El término ‘malware’ ahora es noticia regularmente y los ataques están causando un verdadero impacto económico a las empresas. Según el Informe de Ciberseguridad, más de la mitad (53%) de todos los ataques en 2017 resultaron en daños financieros de más de $500,000 que incluyen, entre otros, la pérdida de ingresos, clientes, oportunidades y flujo de caja.
América Latina es particularmente vulnerable a los ciberataques y muchos países de nuestra región simplemente carecen de la capacidad para responder a los principales incidentes cibernéticos. Sin embargo, hay un camino por recorrer y es multifacético. La colaboración, la tecnología y la capacitación pueden ayudar a que Latinoamérica esté mejor preparada.
Debemos trabajar juntos como una región y colaborar con organizaciones internacionales, gobiernos de países individuales de América Latina y empresas privadas para ser más fuertes.
Cisco está iniciando negociaciones importantes de seguridad con nuestros clientes en Latinoamérica: Conversaciones sobre defensa de ransomware, análisis de amenazas cognitivas, análisis de inteligencia de amenazas, visibilidad de amenazas internas, contenedores de amenazas rápidas y protección contra amenazas en la nube. Estos convenios son el comienzo para estar mejor preparados como región.
Cuantos más ojos estén vigilando la red de una empresa, mayores serán las posibilidades de atrapar a un atacante antes de que se haya producido el daño. Incluso podemos enseñarle a una computadora a ayudarnos a hacer esto. Las tecnologías como la automatización y el aprendizaje automático (inteligencia artificial) ofrecen nuevas formas de identificar y responder a amenazas conocidas y emergentes. Esto es especialmente útil en América Latina, ya que la falta de una fuerza de trabajo capacitada en seguridad es un gran problema en nuestra región.
Lo que nos lleva al aspecto final del camino de América Latina hacia la preparación cibernética: La capacitación. Necesitamos más personas que tengan el conocimiento y las habilidades de ciberseguridad para mantenerse un paso por delante de los atacantes. Cisco Networking Academy se está asociando con 1,550 academias y 3,800 instructores para capacitar a los latinoamericanos en habilidades de ciberseguridad. Unos 450,000 estudiantes se inscribieron en Networking Academy en América Latina en los últimos 12 meses y 1,6 millones ya completaron los cursos.
Al proporcionar un pensum flexible y gratuito, así como el acceso a una red global de capacitación y recursos de apoyo, Cisco Networking Academy no solo está ayudando a que nuestra región esté mejor preparada, sino que también garantiza que miles de latinoamericanos puedan encontrar trabajo. La escasez de habilidades de ciberseguridad se extiende más allá de América Latina, a todo el mundo, esta capacitación permitirá a los latinoamericanos participar activamente en la fuerza de trabajo digital global.
La transformación digital llegó para quedarse. Y los ciberataques son una amenaza creciente que no podemos ignorar. Al trabajar juntos y mantenernos al tanto de las tendencias de ciberseguridad, América Latina puede defender efectivamente nuestra economía digital y fortalecerse en el proceso.