A principios de mes la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) detalló que está trabajando junto al Ministerio de Hacienda en una regulación a las Fintech, por ser nuevos actores protagónicos en el rubro. El foco de la iniciativa resalta como punto clave que exista igualdad de condiciones entre los servicios “tradicionales” y los “tecnológicos”, tema de discusión durante el último tiempo en el país.
El término “Fintech”, que viene de la mezcla entre “Finanzas y Tecnología”, ha despertado gran interés en el país durante el último tiempo. La aparición en el mercado de nuevas empresas enfocadas en transformar el mundo financiero a través de la digitalización, ha creado la oportunidad de llegar a un público mas tecnológico.
Para contextualizar, Chile tuvo el año pasado un periodo positivo para el mercado financiero tradicional, con un alza superior al 34% del Ipsa y más de un 40% en los montos transados en la Bolsa de Comercio de Santiago. Si bien este parece ser un escenario ideal, el país está atrasado en materia tecnológica. Los ejemplos mundiales muestran a las Fintech como una alternativa eficiente en la entrega de servicios relacionados. En potencias mundiales, como USA o UK, durante el 2017 este tipo de compañías logró recaudar más de US$16.600 millones en capitales de riesgo. Además, se estima que en siete años la industria Fintech podría abrir 95 millones de nuevos puestos de trabajo y disminuir en aproximadamente US$ 110.000 millones en evasión tributaria.
“Con una nueva regulación en esta materia se debe trabajar para proteger a los clientes e incentivar la competencia, apuntando hacia la democratización financiera. Las Fintech logran bajar las barreras de entrada para realmente masificar el ingreso al mundo financiero, generándole valor y transparencia al mercado” aseguró Andres Prats, Gerente General de FYNPAL, Fintech que conecta a las entidades financieras y Fondos de Inversión con empresas de todos los tamaños y sectores, funcionando bajo la lógica de un market placet financiero.