Para la industria financiera los datos han sido fundamentales desde hace varios años, si bien esta premisa actualmente es válida para todos los sectores, la banca lo extendió mucho antes que todos.
Los datos abiertos han estado presentes durante mucho tiempo y su importancia ha crecido con el paso de los años. En el pasado, la información era un bien precioso, guardado estrictamente por instituciones tradicionales para mantener una ventaja competitiva. Sin embargo, con el creciente reconocimiento del valor de los datos para la mayoría de las personas, los datos abiertos se han convertido en un tema fundamental, especialmente en el sector financiero.
Los datos abiertos son aquellos que están disponibles gratuitamente para cualquier persona, sin restricciones en su uso o reutilización. Esto incluye datos de agencias gubernamentales, empresas e industrias completas. El objetivo de los datos abiertos es hacer que la información sea fácilmente accesible para todos, permitiendo mayor transparencia, innovación y colaboración. En el sector financiero, los datos abiertos tienen el potencial de reconfigurar la forma en que se diseñan y proporcionan servicios financieros, creando nuevas oportunidades para las empresas y los consumidores.
La importancia de la apertura
Para la industria financiera los datos han sido fundamentales desde hace varios años, si bien esta premisa actualmente es válida para todos los sectores, la banca lo extendió mucho antes que todos. El auge de las fintech ha sido un motor de impulso para ofrecer servicios financieros innovadores; además, muchas de ellas están utilizando datos abiertos como un ingrediente clave en sus soluciones a necesidades del mercado.
Por ejemplo, algunas usan datos abiertos para analizar el comportamiento de usuarios finales. Con ello, crean productos financieros personalizados, al mismo tiempo que reducen riesgos de ciberseguridad.
Los datos abiertos han evolucionado a lo largo de los años, en buena medida a partir de un creciente reconocimiento de su valor. En los primeros días de los datos abiertos, las organizaciones principalmente compartían datos para cumplir con requisitos legales y ya. Pero, a medida que las organizaciones han comenzado a comprender los potenciales beneficios de los datos abiertos, se han vuelto más dispuestos a compartir información de manera voluntaria.
Finanzas y datos abiertos
Hoy en día, se entiende al flujo de datos abiertos como parte de iniciativas de responsabilidad social corporativa. En el sector financiero, su uso ha crecido rápidamente. Particularmente, esto se da en las fintech, en las que hay tres categorías principales: 1) datos de mercado financiero; 2) datos de servicios financieros; y 3) datos de transacción financiera.
En el futuro, es probable que el open data se convierta en una parte aún más importante del sector financiero. Con la disponibilidad creciente de datos y el creciente reconocimiento de su valor, más y más empresas (tanto fintech como tradicionales), se pueden adoptar modelos que privilegien el flujo de información y la transparencia de la industria. Esto creará nuevas oportunidades para la innovación y la colaboración, así como nuevos desafíos para la protección de la privacidad y la seguridad.
¿Qué le espera a esta nueva era?
Una de las tendencias futuras de los modelos de datos abiertos en el sector financiero es el uso de la inteligencia artificial (IA) y el aprendizaje automático (Machine Learning) para analizar y hacer predicciones basadas en datos abiertos. Los algoritmos de IA y ML pueden analizar grandes cantidades de datos en tiempo real, lo que permite predecir las tendencias del mercado, detectar fraudes y crear productos y servicios financieros personalizados.
Otra tendencia futura es el uso de datos abiertos para crear sistemas financieros descentralizados. Los sistemas financieros descentralizados se basan en la tecnología blockchain y permiten la creación de servicios que no están controlados por una sola entidad. Con el uso de datos abiertos, estos sistemas tienen el potencial de crear una industria más equitativa que no esté dominada por un pequeño número de grandes instituciones financieras.
El uso de datos abiertos en el sector financiero tiene el potencial de revolucionar la forma en que se proporcionan sus servicios. Lo único que queda es tender puentes y construir de manera colaborativa para que, poco a poco, se consoliden estos nuevos modelos que traen beneficios para todos: fintech, banca tradicional y, sobre todo, usuarios finales.
Fuente: Expansión