En el marco del México Telecom Summit 2013, integrantes de diversos sectores financieros como Banorte, Visa, Pay Pal y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores mexicana, coincidieron en que la creciente adopción de Smartphone y tabletas impulsan la billetera móvil, a la vez que se generan aplicaciones para eliminar el uso de efectivo agilizando las operaciones de empresas y consumidores.
Destacaron que las nuevas plataformas tecnológicas en el mundo permiten a un Smartphone o tableta convertirse en Terminal Punto de Venta (TPV) mediante la tecnología NFC (Near Field Communication) que además permiten a las organizaciones realizar tareas de marketing digital y publicidad a través de estos dispositivos móviles.
Con poco más de 18 millones de usuarios de Smartphone, la tecnología revoluciona los pagos con tarjeta de crédito y débito en México de forma segura, señalaron.
Existen 5.1 millones de empresas, de las cuales más del 98 por ciento por ciento son pequeñas y medianas (PyMEs), las cuales generan 7 de cada 10 empleos formales en el país, por ello, es necesario que adopten nuevas tecnologías para impulsar su competitividad y así poder vencer barreras a su crecimiento.
Al respecto, explicaron que NFC (Comunicación de Campo Cercano) es una tecnología de comunicación inalámbrica, de corto alcance, actualmente considerada como un estándar para el pago mediante el Smartphone o tableta. Esta tecnología permite hacer pagos mediante el acercamiento de una terminal móvil que cuenta con un tag RFID en el que se configuran los datos del usuario, como su número de tarjeta de débito o crédito, su PIN y sus configuraciones de seguridad.
En 2013, el total de despliegues de dinero electrónico y banca móvil aumentó un 38 por ciento, llegando a los 81.8 millones de clientes registrados a nivel mundial.
En este contexto, las aplicaciones de billetera electrónica podrían reemplazar rápidamente a los pagos con tarjeta, en la medida en que la adopción de las terminales NFC se propaguen en los mercados emergentes y los bancos cuenten con servicios financieros robustos que brinden confianza a los usuarios.
La confianza es el factor que detonará estos servicios y el reto es atender a la comunidad existente.
Fuente:oem.com.mx