Por Ramón Heredia y Roberto Pérez
En la actual Revolución Digital, aparecen disrupciones espectaculares, que tienen el potencial de cambiar industrias enteras e incluso crear otras nuevas, y se presentan con una frecuencia alarmante.
Antes, las tecnologías que cambiaban al mundo solían aparecer muy espaciadamente, a veces con intervalos de siglos, de a una. El arado, la imprenta, la máquina de vapor, la electricidad y la computación no se vieron mayormente impactadas por otras con el mismo potencial.
A partir de la invención y masificación de Internet, todo cambió. Se multiplicó exponencialmente la creación y adquisición del conocimiento, y por eso también aparecieron otras tecnologías que se fueron imponiendo cada vez más rápido, y con marcada tendencia a integrase y complementarse. Y además revolucionan los mercados financieros, irrumpiendo con la fuerza de un huracán.
Luces y sombras que van a de aquí para allá
Hemos visto que los reflectores se fueron enfocando sobre una u otra tecnología, que se iba poniendo “de moda”, y parecía eclipsar a las demás. Fuimos recibiendo sucesivas “sobredosis” de información sobre Manufactura aditiva (Impresión 3D) IOT (Internet de las Cosas), Cloud Computing, Blockchain, Redes Sociales, Metaverso, y desde el año pasado, sobre la estrella ya omnipresente Inteligencia Artificial (IA).
Si alguien quiere saber de qué se trata la famosa IA, hoy no tiene más que abrir su navegador de Internet o entrar en YouTube, y la información lo tomará por asalto. Pero hoy queremos re visitar a una de las últimas que no han dejado de avanzar (aunque no solo el periodismo las ha apartado ligeramente; también hubo inversiones dirigidas a ellas que cambiaron de destino).
¿Qué fue de la vida del “Metaverso”?
Recordemos: el metaverso es un concepto que evolucionó desde su origen en la ciencia ficción hasta convertirse en una realidad. Nació en la literatura de los años 50 y se popularizó con la novela «Snow Crash» de Neal Stephenson, en 1992.
Es un espacio digital persistente, compuesto por múltiples mundos virtuales interconectados, donde las personas pueden interactuar como avatares en un entorno tridimensional. Perfectamente podemos considerarlo la punta de lanza y piedra fundamental de la famosa “WEB 3.0”, la evolución natural de Internet.
Se basa en tecnologías como Blockchain, la Realidad virtual (VR), la Realidad aumentada (AR), y la Inteligencia artificial (AI), que permiten crear experiencias inmersivas y simulaciones detalladas de la realidad o de mundos completamente nuevos. Es una de las tecnologías capaces de “integrar” a las otras. Las utilidades del Metaverso son muchas, e incluyen desde el entretenimiento y los juegos hasta aplicaciones en educación, trabajo colaborativo, comercio electrónico y mucho más.
Alguien dijo que el Metaverso es un “Second life” con anabólicos. Pero, más seriamente, Bloomberg afirma que dentro de cinco años el Metaverso representará un mercado de 800.000 millones de dólares. Y no solo por el desarrollo de las inversiones de Meta (ex Facebook) Microsoft y Google. También gracias a inversiones de y en empresas de gaming con productos que son metaversos en sí mismos, como Roblox, Epic Games o Activision Blizzard, la empresa creadora de hit mundiales como “Call of duty”, “World of Warcraft” o el adictivo “Candy Crush Saga”, que fue adquirida por Microsoft luego de largas negociaciones, en 69.000 millones de dólares. Esto le permitirá al imperio fundado por Bill Gates competir mano a mano con el gigante Epic Games, desarrolladores del “motor 3D” por excelencia (Unreal) y de los híper exitosos juegos “Gears of War” y “Fornite”. Y por supuesto, con el temible holding chino Tencent, dueños de “Riot Games” y por lo tanto del hit global “League of Legends”.
“Plazas digitales” por excelencia (y pronto, financieras)
El impacto esperado del Metaverso en la vida cotidiana es y será enorme. Se anticipa que transformará la manera en que las personas se conectan, aprenden, compran y trabajan, ofreciendo nuevas oportunidades para la interacción social y la economía digital. Junto a la IA y la Blockchain aportarán un cambio de paradigma en la descentralización, la propiedad digital y la creación de experiencias inmersivas.
La industria financiera espera que el Metaverso tenga una incidencia significativa a mediano plazo, porque acelera el desarrollo de soluciones y servicios de ventas y marketing, estrategias de gestión de riesgo, e incrementa la adopción de activos digitales. Las instituciones financieras podrían utilizar el Metaverso para la captación de nuevos clientes, especialmente entre el público más joven (para quienes la idea de ir a un banco les parece inconcebible) y para mejorar la educación financiera de modo verdaderamente interactivo.
Por su relación con Blockchain, acelerará la adopción de los criptoactivos como mecanismo casi excluyente para transmitir valor en los sus entornos virtuales inmersivos, ya que otra modalidad no es posible. Varias instituciones han tomado nota de ello, y pusieron un pie en esos “neo-mundos”. En la plataforma de origen argentino “Decentraland”, encontramos a “Dimensión B”, del Banco de Chile: Este espacio fue fundado y está activo desde Junio del 2023. Por el momento, es de mera información, que no permite hacer operaciones financieras.
También allí encontramos al del Banco Santander, con su espacio “X”, que tuvo su última actualización en Abril de 2023, para la entrega de premios de una de sus convocatorias. Tampoco permite hacer operaciones financieras por ahora.
Hay mucho por decir del Metaverso
Por ejemplo, que hay varios. Y estos son los principales, al día de hoy:
Decentraland: Es el más grande, y se trata de una plataforma donde puedes “crear, explorar y socializar” en un “metaverso descentralizado”: no es propiedad de una empresa, sino de sus usuarios. Se trata de una plataforma de realidad virtual en 3D, basada en la Blockchain de Ethereum. Permite a los usuarios adquirir, construir y monetizar parcelas de “tierra virtuales”, representadas con los NFTs “Land”. Se pueden adquirir con “Maná”, el token propio de Decentraland. Fue creada por los argentinos Ari Meilich y Esteban Ordano. Hay una enorme disparidad en los reportes sobre la cantidad de usuarios que tiene. Según DappRadar, la plataforma tendría apenas 379 usuarios activos diarios. Sin embargo, se menciona que durante un período específico del 3 al 9 de octubre, la plataforma promedió 6.999 visitantes únicos por día (lo que, de sostenerse, representaría 2.554.635 al año).
La fundación de Decentraland se remonta a 2015, con su lanzamiento al público en febrero de 2021. Desde entonces, ha evolucionado significativamente, ofreciendo una buena cantidad de experiencias y oportunidades para la interacción social, el comercio y la expresión creativa. Su “declaración de principios” alega que los usuarios deben ser dueños de sus datos y activos digitales, sin intermediarios centralizados. (https://decentraland.org/)
The Sandbox: Comenzó como plataforma de juegos móviles en 2011 y se transformó en un Metaverso 3D sobre Blockchain en 2018. Hoy cuenta con más de 2 millones de usuarios registrados. Su empresa creadora fue Pixowl, pero actualmente es propiedad del gigante de inversiones en NFT Animoca Brands. Ha recibido inversiones importantes, establecido asociaciones con nombres y marcas como Warner Music, Soft Bank, The Walking Dead, Snoop Dogg y Deadmau5, lo que indica un nivel significativo de inversión y apoyo. Según los datos proporcionados en los resultados de búsqueda, en 2024, el metaverso de Sandbox cuenta con 2 millones de usuarios registrados, 616 usuarios activos diarios, pero ha llegado a 224.840. Y lo que se crea puede monetizarse y venderse a cambio de tokens “Sand” en el mercado de The Sandbox. Fue fundado en 2018 por Arthur Madrid y Sebastian Borget, con una idea que iba más allá de un juego: querían crear una comunidad en la que los usuarios fueran dueños de sus propias creaciones, y pudieran obtener recompensas por el uso del sistema. (https://www.sandbox.game/en/)
Roblox tiene un promedio de 223.172.401 usuarios diarios cada 30 días, según datos actualizados hasta enero de 2024. En este caso, hablamos de un sistema “Play-to-earn” que combina tecnología Blockchain, DeFi y NFT en un entorno 3D. Los jugadores pueden crear y personalizar sus propios juegos y avatares con las herramientas que brinda gratuitamente la plataforma. Contiene a más de 5 millones de creadores, y desde su aparición en 2019 se han registrado más de 450 millones de horas de juego. (https://roblox.com)
Decálogo del buen Metaverso
1- Es social: Está abierto a todo tipo de actividades sociales. Usuarios de todo el mundo pueden comunicarse entre sí utilizando sus avatares.
2- Es descentralizado: Como la tecnología que lo soporta, Blockchain, el Metaverso es descentralizado; su propiedad está distribuida, y los usuarios pueden diseñar los distintos artículos que componen el Metaverso y lanzarlos al mercado.
3- Sin límites: No tiene límites. ¿Cuántos usuarios lo pueden utilizar? ¿Hay un número prefijado de experiencias o mundos? La respuesta es NO. Hasta la fecha el Metaverso no tiene límites ni de experiencias ni de usuarios.
4- Es interoperable: Es una plataforma interactiva e interoperable en tiempo real. Está formado por muchos mundos virtuales que están interconectados. Sus usuarios pueden crear, monetizar y compartir libremente sus ideas.
5- Un espacio para la creatividad: La creatividad en estos mundos no tiene límites. Las marcas exploran el sinfín de oportunidades de las plataformas
6- A tiempo real: El Metaverso funciona como un mundo paralelo. Esto significa que las personas tienen la capacidad de interactuar entre sí en tiempo real.
7- Mundos virtuales sin distancia física: En el Metaverso desaparece la distancia física del mundo real. Los usuarios de todo el mundo pueden “tele transportarse” a cualquier otro lugar de manera instantánea.
8- Economía propia: Las personas pueden trabajar en este mundo virtual, comprar y vender productos o servicios. Las marcas elaboran su presencia en el Metaverso para atraer al público joven.
9- Accesible: Cualquier usuario que tenga un teléfono móvil, una computadora y gafas de AR o VR puede acceder a esta plataforma
10- Persistente: El Metaverso sigue funcionando pese a que el usuario no esté conectado. Es un entorno vivo e independiente en el que la vida tiene continuidad sin tener en cuenta las horas a las que se conecte el usuario.
El Metaverso no se fue a ninguna parte, continúa paso a paso su desarrollo, no será de un día para otro, pero estoy seguro que un día, más temprano que tarde, tu y yo nos descubriremos disfrutando de un momento en el que nuestra mente viva en mundos creados por mentes sanas y felices, navegando en momentos de dicha y que los químicos que deciden nuestros estados de ánimo sean los del bienestar definitivo del Mundo Felix de Aldous Huxley .