Fuente: www.clarin.com
«Pedimos competir en un plano de igualdad y no contra empresas con beneficios fiscales y laborales», disparó hoy Claudio Cesario, presidente de la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), en un nuevo round en la disputa que la banca tradicional mantiene con las fintech.
En las últimas semanas, bancos y fintech vienen cruzando acusaciones en la pelea de fondo por el control del mercado de transacciones financieras. Las entidades tradicionales acusan a las fintech de competencia desleal por contar con exenciones impositivas, mientras que las tecnológicas sostienen que los bancos «cartelizan» su oferta y se abroquelan de manera corporativa para proteger su negocio.
Hoy, en el cóctel de fin de año de ABA , Cesario se refirió a este «contrapunto». En medio de un discurso en el que expresó un fuerte apoyo a la reforma tributaria que impulsa el Gobierno, el ejecutivo cargó contra las fintech al sostener que pagan la mitad de Ingresos Brutos respecto de los bancos tradicionales, mientras que las radicadas en el polo tecnológico de CABA están exentas por diez años de este tributo. Además, remarcó que el 70% del monto que destinan a las contribuciones laborales se computa como crédito fiscal. «La vigencia de reglas de juego claras e iguales debe ser un foco central de competitividad», dijo Cesario en el tramo final de su discurso. Y recalcó que pese a contar con estas ventajas, las fintech «paradójicamente no trasladan dichos beneficios al consumidor y tienen un costo financiero total superior al de cualquier entidad bancaria».
El de hoy fue un nuevo cruce entre los representantes de la banca tradicional y los tecnológicos en el marco del avance de las fintech sobre este negocio.
En las últimas semanas, Marcos Galperín, CEO de Mercadolibre, asumió la defensa de las fintech. «Los bancos son anacrónicos e ineficientes», disparó en una entrevista reproducida en el libro «Argentina innovadora», de las periodistas Silvia Naishtat y María Eugenia Estenssoro. «No hay competencia en el negocio financiero, hay una cartelización muy poderosa en la Argentina», dijo.
El sector de las fintech creció 120% en el último año, según datos de la cámara que agrupa a estas compañías, concentrándose en clientes monotributistas o autónomos que muchas veces no califican para acceder a una cuenta bancaria tradicional.
Desde el sector señalan que Argentina es tierra fértil para este negocio, ya que la tasa de préstamos en el país es muy baja: apenas llega al 15% del PBI, mientras que en Chile supera el 50%, en Europa es el 98% y en Estados Unidos, del 160%.
En el cóctel, Cesario destacó como una «buena noticia» que la Argentina «haya decidido encarar de manera frontal los cambios necesarios para su definitiva normalización». Y apuntó que las reformas impositiva, laboral y del mercado de capitales establecerán las bases de consolidación para un crecimiento sostenible en el tiempo.
«Es necesario que el sendero marcado por el Gobierno de reducción del déficit fiscal tenga el más amplio consenso ya que todos sabemos los efectos del mismo y de la inflación como generadores de pobreza y exclusión», señaló.
