Crear unidades de innovación dedicadas al tema, realizar concursos internos y charlas motivacionales son algunas de las ideas implementadas.
Un dato clave: frente a la cambiante y acelerada evolución de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), las empresas en Chile y de la región, están implementando estrategias y plataformas para que sus trabajadores promuevan nuevas ideas, desarrollen iniciativas de negocios, de mejora de procesos y/o productos, y contribuyan a innovar dentro de la compañía.
El intraemprendimiento, según los expertos, es el nuevo motor de las organizaciones, las que para “enganchar” a sus empleados, están aplicando fórmulas como la creación de programas específicos de innovación que levanten emprendimientos internos; organizando concursos y charlas motivacionales que despierten la creatividad.
El intraemprendimiento no es exclusivo del sector TIC, no obstante, la necesidad de estar en constante innovación y creando nuevos productos, las convierte en entes activos en esta área. Si bien, gran parte de las multinacionales tecnológicas -como Google- ponen en práctica estas fórmulas, en Chile el escenario aún es lento. Según Fernando Benavides, gerente de Innovación de In Motion, “se está bastante en pañales. Son pocas las empresas que tienen políticas y condiciones especiales para que los trabajadores puedan realizar emprendimientos”.
Por ejemplo, un requisito necesario si se quiere potenciar el intraemprendimiento en las TIC es que éstas cuenten con una estructura formal dedicada al tema. En este sentido, Leonardo Covalschi, gerente general de Synapsis, señala que esta estructura se podría generar, a través de programas de innovación, cuya mantención anual implicaría una inversión entre US$ 100 mil y ?US$ 150 mil. La idea, explica, es acompañar al colaborador desde el momento en que formula la propuesta, hasta que ésta se convierte en un producto y, en el mejor de los casos, se venda externamente.
En general, la mayoría de los trabajadores proponen aplicaciones para dispositivos móviles, -muchas con sistemas de geolocalización-; aplicaciones ?offline que no requieren conectividad, y creación de sitios web con información de interés para los trabajadores.
Por ejemplo, In Motion hace un mes lanzó el programa “I2”, “en el que se definen condiciones para que los trabajadores presenten sus ideas de proyectos, son evaluados, reciben apoyo económico, técnico y asesoría para implementarlo dentro de la compañía”, comenta Benavides.
Armin Bachmann, Community Support Manager de Artech, cuenta que en 2013 y a comienzos de este año, la empresa realizó un concurso interno -“Innovation Challenge”-, iniciativa en la que participaron los trabajadores, aportando proyectos de innovación y mostrando prototipos. Uno de ellos, dice, fue una aplicación, por ejemplo, destinada al fútbol de Uruguay, que incluye un catálogo de los partidos y el detalle de los integrantes del equipo. “Surgió como un proyecto interno y hoy es una solución que se está exportando”, asegura.
Nicolás Jodal, CEO de GeneXus International comenta que en la compañía, “si a alguien se le ocurre una idea adyacente, la apoyamos y, en determinado momento, hacemos un spin off de ella”. Eso, explica, cuando la propuesta del trabajador de alguna manera se aleja de la líneas de productos de la compañía. Así ocurrió, con la idea de un empleado -respaldada por GeneXus- y que se transformó en una empresa de Relaciones Públicas.
Marcelo Lefort, CEO y co-fundador de Appizard indica que una de las principales ventajas del intraemprendimiento es ser “una forma de lograr nuevos y frescos ingresos a la compañía, diversificando productos y mejorando las ventas”. En su caso, envían a los trabajadores a capacitación, y luego, presentan proyectos, por ejemplo, aplicaciones para dispositivos móviles o para web.
Fuente: DF.