El crédito digital está redefiniendo el acceso a financiamiento en América Latina, impulsado por la tecnología y el crecimiento del ecosistema fintech. Aunque enfrenta retos en regulación y educación financiera, su avance promete mayor inclusión, agilidad y equidad en los servicios financieros.
En un mundo cada vez más digitalizado y con un enfoque creciente hacia la inclusión financiera, el crédito ha experimentado una transformación profunda. El surgimiento del crédito digital ha revolucionado la manera en que las personas acceden a financiamiento, gestionan sus finanzas y realizan transacciones, especialmente en regiones como Latinoamérica, donde la demanda por soluciones ágiles y accesibles es cada vez mayor.
Desde MO Credit Management Platform, plataforma líder en la gestión de créditos digitales en la región, hemos visto de primera mano cómo este cambio está impactando de forma positiva tanto a emisores como a usuarios finales. Como explica Veronica Crisafulli, CEO y fundadora de MO: “La tecnología bien aplicada puede cerrar brechas históricas en el acceso al crédito y abrir nuevas oportunidades para millones de personas.”
El crédito digital se refiere a los préstamos otorgados a través de canales digitales, sin la intervención de intermediarios físicos, y apoyado en decisiones automatizadas basadas en datos. En países como Colombia, este modelo ha tenido una adopción creciente, impulsado por avances tecnológicos, la alta penetración de internet móvil y el crecimiento del ecosistema fintech.
De acuerdo con cifras recientes de Colombia Fintech, actualmente existen 322 fintechs activas en el país, consolidando a Colombia como uno de los ecosistemas más dinámicos de América Latina en servicios financieros digitales. Entre las soluciones más utilizadas por los usuarios destacan los créditos digitales y los pagos electrónicos, demostrando una clara evolución en los hábitos financieros de la población.
Fuente: Semana