Fuente: www.expansion.com
La consultora inmobiliaria CBRE eligió a Urban Data Eye y LoLoLo, en sus premios anuales, como las mejores iniciativas ‘proptech’.
El año pasado, la ciudad norteamericana de Pittsburgh contrató los servicios de la start up española Urban Data Eye (UDE), especializada en el análisis de datos en entornos urbanos, para entender cuál era el comportamiento de sus ciudadanos en una de sus plazas más icónicas.
«Querían conocer cómo de rentable era el uso de ese espacio y qué impacto habían tenido las inversiones que habían hecho los comercios en la plaza», explica Javier Argota, cofundador de UDE. «Detectamos que la mitad del espacio estaba infrautilizado y no se le estaba sacando todo el partido posible. Un porcentaje muy alto de los transeúntes se quedaban en el centro y no se acercaban a las tiendas. Sólo con un cambio de ubicación del mobiliario urbano logramos duplicar el número de personas que circulaban por este lugar», señala.
Para ello, la compañía analizó el comportamiento de los transeúntes a través de las múltiples cámaras de seguridad que hay repartidas por la plaza. «Analizamos todas esas imágenes con una inteligencia artificial que, de forma anónima, identifica objetos de interés como personas o vehículos. Pero también si son hombres o mujeres, si llevan bolsas o delante de qué comercios se paran y cuánto tiempo. El sistema es capaz de transformar la información de las cámaras en datos útiles para los propietarios y comerciantes«, asegura Argota.
Una tecnología que UDE quiere llevar también a centros comerciales, oficinas y hoteles. «Podemos contabilizar, por ejemplo, cuánto tiempo está ocupada una sala de reuniones o el tiempo que pasan los clientes esperando para hacer el check in», apunta Rodrigo Delso, otro de los fundadores.
Poder de los datos
Se trata sólo de un ejemplo pero pone de manifiesto el creciente poder de los datos y las múltiples aplicaciones que tienen en un sector poco digitalizado como el del real state. «Los datos pueden mejorar la experiencia de propietarios y usuarios pero hasta ahora se han desarrollado poco. Otras industrias como la financiera o la del automóvil están más avanzadas», apunta Carlos Casado, responsable de Operaciones de CBRE en España.
UDE es precisamente una de las start up que la consultora ha seleccionado en la segunda edición de su Proptech Challenge, el concurso con el que la compañía busca el mejor talento en el ecosistema proptech y que este año ha recibido más de 180 candidaturas. CBRE premia a los ganadores en dos categorías: a la start up con mayor impacto, donde se ha impuesto UDE, y a la idea más disruptiva. En esta categoría se ha alzado como ganador LoLoLo, liderada por Álvaro Cosidó.
El objetivo de este arquitecto y diseñador computacional es trasladar al real state herramientas que a día de hoy se utilizan en el diseño urbano. «Las principales cadenas de hostelería ya utilizan estas herramientas de sintaxis espacial para decidir las localizaciones de sus establecimientos. También se emplean para el diseño de las ciudades y la optimización del transporte público. Sin embargo, por su complejidad no han estado nunca al alcance de los propietarios de pequeños locales», asegura Cosidó.
LoLoLo emplea la sintaxis espacial, la inteligencia artificial y el big data para comparar inmuebles y ubicaciones comerciales en base a datos como la audiencia potencial, el tráfico y la visibilidad.»Un local comercial debería tener un sello de este tipo que ayude a su valoración. Esta herramienta permite comparar locales en base a criterios científicos y no sólo por el precio, las fotografías o los metros cuadrados del espacio«, concluye. La start up espera tener lista una beta de esta tecnología en los próximos meses gracias al apoyo de CBRE. La consultora ha llegado a un acuerdo con ambas empresas para comenzar a ofrecer estos servicios a sus clientes.