Cómo el fundador de Stability AI hizo fracasar su startup de mil millones de dólares

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Facturas sin pagar, contratos fallidos y una reunión desastrosa con el CEO de Nvidia. La sorprendente caída de Emad Mostaque.

El fundador de Stability AI, Emad Mostaque, subió al escenario en el Terranea Resort en Palos Verdes, California, entre aplausos atronadores y una presentación de un Aristóteles generado por IA que lo anunció como “un Prometeo moderno” con “la astucia de Atenea y la visión de Dédalo”.

“Bajo su liderazgo, la IA se convierte en la fuerza colosal lista para vencer a las serpientes gemelas de la enfermedad y la dolencia, y extender la rama de olivo de la longevidad”, proclamó el falso Aristóteles.

“Creo que esa fue la mejor introducción que he tenido jamás”, dijo Mostaque.

Pero detrás de la introducción idealizada de Mostaque se escondía una verdad sombría y en rápida metástasis. Stability, una de las startups más candentes de la IA, estaba tambaleándose. Llevaba meses sin dinero y Mostaque no había podido conseguir suficiente financiación adicional. Había incumplido los pagos a Amazon, cuyo servicio en la nube sustentaba las ofertas principales de Stability. El equipo estrella de investigación detrás de su generador de texto a imagen, Stable Diffusion, había presentado su renuncia apenas tres días antes y otros líderes senior le habían dado un ultimátum: renunciar o ellos también se marcharían.

Aun así, en el escenario, ante una audiencia masiva de colegas y acólitos, Mostaque habló a lo grande. “La IA son aviones a reacción para la mente”, opinó. “La IA es nuestra inteligencia colectiva. Es el Coloso humano”. Afirmó que una nueva versión más rápida del generador de imágenes Stable Diffusion lanzada a principios de mes podía generar “200 gatos con sombreros por segundo”. Pero más tarde, cuando se le preguntó sobre el modelo financiero de Stability, Mostaque titubeó. “No puedo decirlo públicamente”, respondió. “Pero va bien. Estamos por encima de lo previsto”.

Cuatro días después, Mostaque renunció como CEO de Stability, tal y como informó Forbes antes. En un post en X, anteriormente conocido como Twitter, afirmó que había renunciado voluntariamente de su cargo para descentralizar “la concentración de poder en la IA”. Pero las fuentes le dijeron a Forbes que no era así. Entre bastidores, Mostaque había luchado por mantener su puesto y el control a pesar de la creciente presión externa e interna para que dimitiera. Documentos de la empresa y entrevistas con 32 empleados actuales y anteriores, inversionistas, colaboradores y observadores de la industria sugieren que su salida abrupta fue el resultado de un mal juicio empresarial y un gasto excesivo descontrolado que minó la confianza en su visión y liderazgo, y que finalmente dejó a la empresa sin capacidad de acción.

Mostaque, a través de sus abogados, se negó a comentar oficialmente sobre una lista detallada de preguntas relacionadas con este reportaje. Sin embargo, en un correo enviado a Forbes, cuestionó las acusaciones de forma general. “Nadie te dice lo difícil que es ser director general y hay mejores directores generales que yo para escalar un negocio”, dijo en un comunicado. “No estoy seguro de que nadie más hubiera sido capaz de construir y hacer crecer el equipo de investigación para crear los mejores y más utilizados modelos que existen, y estoy muy orgulloso del equipo. Espero pasar al siguiente problema y, con suerte, mover la aguja”.

En un comunicado enviado por correo electrónico, Christian Laforte y Shan Shan Wong, los codirectores generales interinos que reemplazaron a Mostaque, afirmaron que “la empresa sigue centrada en comercializar su tecnología líder mundial” y en proporcionarla “a socios de todas las industrias creativas”.

“Ese hombre legítimamente quería transformar el mundo”, dijo un antiguo empleado a Forbes. De verdad quería entrenar modelos de IA para niños en Malawi. ¿Era práctico? Absolutamente no”.

Tras fundar Stability en 2019, Mostaque convirtió la empresa en un gigante de la IA en sus inicios, al aprovechar un proyecto de investigación prometedor que se convertiría en Stable Diffusion y financiarlo para convertirlo en una realidad empresarial. La facilidad con la que el software generaba imágenes detalladas a partir de las indicaciones textuales más simples cautivó inmediatamente al público: 10 millones de personas lo utilizaban a diario, según informó la empresa a Forbes a principios de 2023. Para algunos creyentes, Mostaque era un defensor crucial del desarrollo de la IA de código abierto en un espacio dominado por los sistemas cerrados de OpenAI, Google y Anthropic.

Sin embargo, el ascenso de su startup a una de las más comentadas en la IA generativa se basó en parte en una serie de exageraciones y afirmaciones engañosas, tal y como informó Forbes el año pasado (Mostaque disputó algunos puntos en ese momento). Y continuaron después de que recaudara US$100 millones con una valoración de US$1.000 millones, apenas unos días después del lanzamiento de Stable Diffusion en 2022. Su incapacidad para cumplir con una serie de grandes promesas, como la construcción de modelos de IA personalizados para estados nacionales, y su decisión de invertir decenas de millones en investigación sin un plan de negocio sostenible, erosionaron los cimientos de Stability y pusieron en peligro su futuro.

“Ese hombre legítimamente quería transformar el mundo”, dijo un antiguo empleado a Forbes. De verdad quería entrenar modelos de IA para niños en Malawi. ¿Era práctico? Absolutamente no”.

Para octubre de 2023, a Stability le quedarían menos de US$4 millones en el banco, según un memorando interno preparado para una reunión de la junta directiva que conoció Forbes. Además, una deuda creciente, incluyendo meses de pagos atrasados a Amazon Web Services, ya la había dejado en números rojos. Para evitar sanciones legales por saltarse la nómina del personal estadounidense, explicaba el documento, la startup con sede en Londres estaba considerando retrasar los pagos de impuestos al gobierno del Reino Unido.

El armamento de GPUs (Graphics Processing Unit) de Stability, los chips extremadamente potentes e igualmente caros que sustentan la IA, eran los que estaban gravando las finanzas de la compañía. Albergados por AWS, habían sido durante mucho tiempo uno de los puntos para presumir de Mostaque; a menudo los promocionaba como uno de los 10 supercomputadores más grandes del mundo. Eran responsables de ayudar a los investigadores de Stability a construir y mantener uno de los mejores generadores de imágenes de IA, así como a abrir nuevos e importantes caminos en la generación de audio, vídeo y modelos 3D. “Sin duda, Stability sigue lanzando muchos modelos”, dijo un exempleado. “Puede que no haya obtenido beneficios con ello, pero el ecosistema en general se ha beneficiado de gran manera”.

Pero los costos asociados a tanta computación ahora amenazaban con hundir a la empresa. Según una previsión financiera interna de octubre, Stability estaba en camino a gastar US$99 millones en computación en 2023. También se observaba que Stability estaba pagando a plazos las facturas de AWS de julio (por US$1 millón) y “no planeaba pagar a AWS a finales de octubre por el uso de agosto (US$7 millones)”. Luego estaban las facturas de septiembre y octubre, más US$1 millón que se debían a Google Cloud y US$600.000 al centro de datos en la nube para GPU CoreWeave. (Amazon, Google y CoreWeave declinaron hacer comentarios).

Con otros US$54 millones asignados a salarios y gastos operativos, los costos totales proyectados de Stability para 2023 eran de US$153 millones. Pero, según su informe financiero de octubre, sus ingresos proyectados para el año natural eran sólo de US$11 millones. Stability iba camino de perder más dinero al mes del que ganaba en todo un año.

La delicada situación financiera de la empresa había incomodado por completo a los inversionistas actuales de Stability, incluyendo a Coatue, que había invertido decenas de millones en la empresa durante su ronda de financiación de US101 millones en 2022. A mediados de 2023, Mostaque accedió a una auditoría independiente después de que Coatue planteara una serie de preocupaciones, según una fuente con conocimiento directo del asunto. El resultado de la investigación no está claro. Coatue rechazó hacer comentarios.

A la semana de una reunión de la junta directiva a principios de octubre, en la que Mostaque compartió esa previsión financiera, Lightspeed Venture Partners, otro importante inversionista, envió una carta a la junta directiva incitando a vender la empresa. Las cifras alarmantes habían “minado gravemente” la confianza de la compañía en la capacidad de Mostaque para dirigirla.

“En particular, nos sorprende y preocupa profundamente una posición de tesorería que se nos acaba de revelar y que es incompatible con las discusiones previas sobre este tema”, escribió el consejero general de Lightspeed, Brett Nissenberg, en la carta, de la que Forbes tiene una copia. “Lightspeed cree que es poco probable que la empresa pueda financiarse en términos que garanticen su sólida posición financiera a largo plazo”. (Lightspeed declinó una solicitud de comentarios).

Los llamados a la venta llevaron a Stability a empezar a buscar un comprador en silencio. Bloomberg informó en noviembre que Stability se había puesto en contacto con las startups de IA Cohere y Jasper para medir su interés. Stability lo negó, y el director ejecutivo de Jasper, Timothy Young, hizo lo mismo cuando Forbes se puso en contacto con él para pedirle comentarios. Un representante de Cohere declinó hacer comentarios.

Sin embargo, una empresa de IA prominente confirmó que los representantes de Mostaque se habían puesto en contacto con ellos para tantear el terreno. Esas conversaciones no avanzaron porque “los números no cuadraban”, dijo a Forbes esta persona, que prefirió no ser identificada debido a la naturaleza confidencial de las conversaciones. Stability también intentó cortejar a Samsung como comprador, llegando incluso a redecorar su oficina antes de una reunión prevista con el gigante coreano. (Samsung dijo que invirtió en Stability en 2023 y que no comenta las discusiones de fusiones y adquisiciones).

Coatue había estado pidiendo la renuncia de Mostaque durante meses, según una fuente con conocimiento directo. Pero ellos y otros inversionistas no pudieron expulsarlo porque era el accionista mayoritario de la empresa. Cuando intentaron una táctica diferente reuniendo a otros inversionistas para ofrecerle un paquete de acciones atractivo para que renunciara, Mostaque se negó, según dos fuentes. Para octubre, Coatue y Lightspeed habían llegado a su límite. Coatue abandonó el consejo y Lightspeed renunció a su puesto de observador.

“Emad enfureció tanto a nuestros inversionistas iniciales que simplemente nos está imposibilitando recaudar más dinero en términos aceptables”, dijo un ejecutivo actual de Stability a Forbes.

Los primeros meses de 2024 vieron erosionar aún más la posición de Stability. Despidieron empleados silenciosamente. Tres personas con conocimiento de la situación estiman que se recortó al menos el 10% del personal. Y las reservas de efectivo continuaron disminuyendo. Mostaque mencionó un salvavidas en la reunión de la junta de octubre: US$95 millones en financiamiento provisional de nuevos inversionistas, pendiente de la debida diligencia. Pero al final, solo se transfirió una fracción, que según dos fuentes, fue en buena parte por Intel, que según Forbes invirtió US$20 millones, una fracción de lo informado. (Intel no respondió a una solicitud de comentarios al cierre de esta edición).

Dos horas después de que Forbes revelara la noticia de los planes de Mostaque de renunciar como CEO, Stability emitió un comunicado de prensa confirmando su renuncia. El director de operaciones Wong y el director de tecnología Laforte se han hecho cargo interinamente. Mostaque, quien dijo en X que aún posee la mayoría de la compañía, también renunció a la junta directiva, que ahora ha iniciado una búsqueda de un CEO permanente. “Hay mucho trabajo por hacer para darle la vuelta a la situación, y muy poco tiempo para hacerlo”, dijo el ejecutivo actual de Stability: “Todavía existe la posibilidad de una historia de recuperación, pero las probabilidades disminuyen día a día”. 

‘Preguntas microscópicas’

En julio de 2023, Mostaque aún pensaba que podía lograrlo. A mediados de mes, compartió un plan de recaudación de fondos con sus socios. Era tremendamente optimista, detallando la obtención de US$500 millones en efectivo y otros US$750 millones en instalaciones informáticas de inversionistas destacados como Nvidia, Google, Intel y el Banco Mundial (Nvidia y Google declinaron comentar. Intel no respondió. El Banco Mundial dijo que no invirtió en Stability). En un mensaje de Slack, obtenido por Forbes, Mostaque dijo que Google estaba “dispuesto a moverse rápido” y que la ronda “probablemente sería sobresuscrita”.

No fue así. Tres personas con conocimiento directo de estos esfuerzos de recaudación de fondos le dijeron a Forbes que, si bien hubo cierto interés en Stability, las conversaciones a menudo se estancaban cuando llegaba el momento de revelar las finanzas. Dos de ellos señalaron que, a principios de año, Mostaque simplemente había dejado de comunicarse con los capitalistas de riesgo que pedían números. Solo una empresa invirtió por esa época: Sound Ventures, del actor Ashton Kutcher, con US$35 millones en forma de un pagaré convertible SAFE (Acuerdo Simple para Futuras Acciones) durante el segundo trimestre, según un documento interno. (Sound Ventures no respondió a una solicitud de comentario).

Y aunque logró concertar una reunión con Nvidia y su director ejecutivo, Jensen Huang, terminó en desastre, según dos fuentes. “Bajo las preguntas microscópicas de Jensen, Emad simplemente se derrumbó”, dijo a Forbes una persona con conocimiento interno. También dijeron que Huang rápidamente concluyó que Stability no estaba lista para una inversión de Nvidia. Mostaque le dijo a Forbes en un correo electrónico que no se había reunido con Huang desde 2022, excepto para saludarlo y charlar un poco en algunas ocasiones posteriores. Su mensaje de julio de 2023 menciona un plan para recaudar US$150 millones de Nvidia. (Nvidia declinó comentar).

Después de que una investigación de Forbes en junio, citando a más de 30 fuentes, revelara el historial de afirmaciones engañosas de Mostaque, este tuvo dificultades para recaudar fondos, según le dijo un inversionista de Stability a Forbes. (Mostaque disputó la historia en ese momento y la llamó “mentiras coordinadas” en su correo electrónico de esta semana a Forbes). Cada vez más, los inversionistas analizaban sus afirmaciones y presionaban por datos. Y Young, ahora director ejecutivo de Jasper, rechazó una oferta verbal para ser presidente de Stability después de leer el artículo, según una fuente con conocimiento directo del asunto. El colapso de las conversaciones irritó a la junta y a otros ejecutivos, quienes esperaban que Young compensara las habilidades de ventas y gestión empresarial que le faltaban a Mostaque, según cuatro personas relacionadas. (Young declinó comentar).

Cuando el liderazgo senior de Stability se reunió en Londres para la conferencia CogX en septiembre, la financiación aún no se había cerrado. Allí, un grupo de ejecutivos confrontó a Mostaque haciéndole preguntas sobre la situación de caja y la viabilidad de la empresa, según tres personas con conocimiento directo del incidente, no obtuvieron la claridad que esperaban.

Para octubre, Mostaque había reducido su objetivo de recaudación de fondos en más del 80%.

Los meses siguientes vieron una salida constante de personal: el asesor general Adam Avrunin; los vicepresidentes Mike Melnicki, Ed Newton-Rex y Joe Penna; la directora de personal Ozden Onder; culminando con la desmoralizante salida en marzo de los desarrolladores principales de Stable Diffusion, Robin Rombach, Andreas Blattmann, Patrick Esser y Dominik Lorenz. Rombach, quien dirigió el equipo, había estado buscando irse durante meses, dijeron dos fuentes, y primero amenazó con renunciar el verano pasado debido a los fracasos de recaudación de fondos. Otros se fueron por preocupaciones sobre el flujo de caja, así como por las responsabilidades, incluido lo que cuatro personas describieron como el enfoque laxo de Mostaque para garantizar que los productos de Stability no pudieran usarse para producir imágenes de abuso sexual infantil.

“Stability AI está comprometida con prevenir el mal uso de la IA y prohíbe el uso de nuestros modelos de imágenes y servicios para actividades ilegales, incluidos los intentos de editar o crear CSAM (imágenes de abuso sexual infantil)”, dijo Ella Irwin, vicepresidenta senior de integridad, en un comunicado.

Newton-Rex le dijo a Forbes que renunció porque no estaba de acuerdo con la posición de Stability de que entrenar IA con trabajo con derechos de autor sin consentimiento es un uso justo. Melnicki y Penna declinaron comentar. No se pudo contactar a Avrunin y Onder para comentarios. Ninguno de los investigadores respondió a las solicitudes de comentarios.

‘Candy Land o Coney Island’

La partida de los investigadores de Stable Diffusion como grupo dice mucho sobre el estado de Stability AI. Los investigadores de la compañía eran considerados sus joyas de la corona, y su trabajo se subvencionaba con un torrente de costoso poder de cómputo que incluso se extendía a personas externas. Martino Russi, un investigador de inteligencia artificial, le dijo a Forbes que, aunque nunca estuvo formalmente empleado por Stability, la compañía le proporcionó una cantidad “asombrosa” de recursos computacionales entre enero y abril de 2023 para desarrollar un generador de video de IA que Stability podría usar algún día. “Era como estar en un paraíso,” dijo Russi, quien estima que su experimento, finalmente desechado, le costó a la compañía US$2.5 millones.

Stable Diffusion era, a la vez, el producto estrella de Stability y su crisis financiera existencial. Un empleado actual lo describió a Forbes como “un gigantesco vacío que absorbía todo: dinero, recursos computacionales, gente”. Si bien el software se usaba ampliamente, y Mostaque afirmaba que las descargas alcanzaban los cientos de millones, Stability luchaba por convertir ese éxito masivo en ingresos. Mostaque sabía que era posible, compañías similares como Databricks, Elastic y MongoDB habían convertido un producto gratuito en un negocio lucrativo, pero simplemente no podía descifrar cómo.

Su primer intento fue la API de Stability, que permitía a los clientes pagos integrar Stable Diffusion en sus propios productos. A principios de 2023, un puñado de pequeñas empresas, como la aplicación de generación de arte NightCafe y la startup de software de presentación Tome, firmaron contratos, según cuatro personas con conocimiento de los acuerdos. Pero el mal servicio de administración de cuentas de Stability enfadó a muchos, y en cuestión de meses NightCafe y Tome cancelaron sus contratos, dijeron tres personas. El fundador de NightCafe, Angus Russell, le dijo a Forbes que su compañía se cambió a un competidor que “ofrecía costos de inferencia mucho más baratos y un servicio más amplio”. Tome no respondió a una solicitud de comentarios.

Mientras tanto, los esfuerzos de Mostaque para cortejar a compañías más grandes como Samsung y Snapchat estaban fracasando, según cinco personas familiarizadas con el esfuerzo. Canva, que ya era uno de los usuarios más pesados de Stable Diffusion de código abierto, tuvo múltiples discusiones con Stability, que buscaba un contrato que esperaba generara varios millones en ingresos anuales. Pero el trato nunca se materializó, según dijeron cuatro fuentes.

“Estas tres compañías nos querían y nos necesitaban”, dijo un ex empleado a Forbes. “Habrían sido los clientes perfectos”. (Samsung, Snap y Canva se negaron a comentar).

“Hay empresas que han recaudado cientos de millones de dólares que tienen un valor intrínseco mucho menor que Stability”, dijo la persona. “Un caballero blanco aún podría aparecer”.

“No es que no hubiera apetito por pagarle a Stability, había toneladas de compañías que lo habrían hecho”, dijo el ex empleado. “Había una gran oportunidad y demanda, pero solo una resistencia a la ejecución”.

La otra gran idea de Mostaque era proporcionar a los gobiernos modelos nacionales de IA personalizados que estimularan sus economías y ciudadanía. “Emad imagina un mundo donde la IA, a través de 100 modelos nacionales, no sirva como una herramienta para unos pocos, sino como un benefactor para todos, prometiendo enfrentar grandes adversarios, el cáncer, el autismo y el paso del tiempo mismo”, dijo el avatar de IA de Aristóteles en su introducción a la conferencia.

Mostaque les dijo a varios clientes potenciales que podía entregar dichos modelos en 60 días, un plazo insostenible, según dos personas relacionadas. Stability intentó desarrollar un modelo para el gobierno de Singapur a pesar de las protestas de los empleados que cuestionaban su viabilidad técnica, según informaron tres fuentes familiarizadas con el esfuerzo a Forbes. Pero no pudo lograrlo y Singapur nunca se convirtió en cliente. (El gobierno de Singapur confirmó que no llegó a un acuerdo con Stability, pero se negó a responder preguntas adicionales).

A medida que Stability pasaba de una idea de negocio nueva a otra, los recursos se reasignaban abruptamente y los investigadores también. Los cambios bruscos en una organización en gran parte compartimentada desmoralizaban y enfurecían a los empleados.

“Había cosas ‘urgentes’, cosas ‘muy urgentes’ y cosas ‘súper urgentes’”, se quejó un ex empleado. “Nada de esto parece importante si todo es importante”.


Otro ex ejecutivo de Stability fue mucho más directo en su evaluación. “Emad es el líder más desorganizado con el que he trabajado en mi carrera”, le dijo esta persona a Forbes. “No tiene visión y cambia de dirección todas las semanas, a menudo en función de lo que ve en Twitter”.

En una entrevista en video publicada poco antes de que saliera esta historia, Mostaque explicó su estilo de liderazgo: “Soy particularmente bueno para lograr que creativos, desarrolladores, investigadores y otros alcancen su máximo potencial en el diseño de sistemas. Pero no debería estar lidiando con recursos humanos, operaciones, desarrollo comercial y otros elementos. Hay gente mucho mejor que yo para hacer eso”.

‘El material que da la sensación más sucia’

Para diciembre de 2023, Stability había abandonado parcialmente sus raíces de código abierto y anunció que cualquier uso comercial de Stable Diffusion tendría un costo mínimo de US$20 mensuales para los clientes (el uso no comercial y de investigación de Stable Diffusion seguiría siendo gratuito).

Sin embargo, en privado, Stability estaba considerando una fuente de ingresos más lucrativa: revender el poder de cómputo que alquilaba a proveedores como AWS, según seis personas cercanas. Aunque era esencialmente un arbitraje de GPUs, Stability enmarcó la estrategia para los inversionistas como una oferta de “servicios gestionados”. Su informe financiero de octubre, bastante condenatorio, proyectaba con optimismo que dicha oferta generaría US$139 millones en 2024, el 98% de sus ingresos. Varios empleados en ese momento le dijeron a Forbes que temían que revender el poder de cómputo, incluso si la compañía lo llamaba “servicios gestionados”, violaría los términos del contrato de Stability con AWS. Amazon declinó comentar. “La consigna internamente era que no estamos revendiendo poder de cómputo”, dijo un ex empleado. “Esto fue algo que se sintió muy sucio”.

Stability también discutió la reventa de un grupo de chips Nvidia A100, alquilados a través de CoreWeave, a la firma de capital de riesgo Andreessen Horowitz, según tres fuentes. “Fue bajo el pretexto de servicios gestionados, pero no hubo ninguna gestión”, le dijo una de estas personas a Forbes. Andreessen Horowitz y CoreWeave declinaron comentar.

Stability no respondió a las preguntas sobre si planea continuar con esta estrategia ahora que Mostaque está fuera de escena. Sin importar eso, los codirectores ejecutivos interinos Wong y Laforte tienen un plazo ajustado para limpiar el desorden que dejó. El presidente de la junta, Jim O’Shaughnessy, dijo en un comunicado que confiaba en que la pareja “dirigiría hábilmente a la compañía hacia el desarrollo y la comercialización de productos de inteligencia artificial generativa líderes en la industria”. Pero la quema de efectivo sigue superando con creces los ingresos. El Financial Times informó que la compañía generó US$5,4 millones en ingresos en febrero, frente a US$8 millones en costos. Varias fuentes dijeron que existen preocupaciones continuas sobre poder pagar la nómina de los 150 empleados restantes. Los puestos de liderazgo no han sido llenados por meses en medio del desorden, dejando a la empresa sin rumbo.

Mientras tanto, una amenaza legal potencialmente catastrófica se cierne sobre la compañía: tres demandas por infracción de derechos de autor presentadas por Getty Images y un grupo de artistas en los EE. UU. y el Reino Unido, quienes afirman que Stability usó ilegalmente su arte y fotografía para entrenar los modelos de inteligencia artificial que impulsan Stable Diffusion. Un tribunal con sede en Londres ya ha rechazado el intento de la empresa de desestimar una de las demandas sobre la base de que ninguno de sus investigadores estaba radicado en el Reino Unido. Y la afirmación de Stability de que la demanda de Getty en Delaware debería ser bloqueada porque es una empresa con sede en el Reino Unido. (Stability no respondió a preguntas sobre el litigio).

Los litigios de derechos de autor relacionados con la inteligencia artificial “podrían durar años”, según Eric Goldman, profesor de derecho en la Universidad de Santa Clara. Le dijo a Forbes que aunque los que demandan a las empresas de inteligencia artificial enfrentan una batalla cuesta arriba para superar el precedente legal existente sobre infracción de derechos de autor, la cantidad de argumentos para presentar es prácticamente inagotable. “Como en la teoría militar, si hay una brecha en tus líneas, es por ahí por donde el enemigo se cuela, si alguno de esos argumentos tiene éxito, podría cambiar por completo el entorno de la inteligencia artificial generativa”, dijo. “En cierto sentido, la inteligencia artificial generativa como industria tiene que ganar todo”.

Stability, que tenía más de US$100 millones en el banco hace solo un año y medio, está en un gran problema. No solo necesita más financiamiento, sino también un modelo de negocio viable, o un comprador con la visión y la capacidad para tener éxito en un sector competitivo y de rápido movimiento.

En una reunión general de este lunes pasado, los nuevos líderes de Stability detallaron un camino a seguir. Un punto de énfasis: un plan para administrar mejor los recursos y los gastos, según una persona presente. Es un comienzo, pero la intromisión de Mostaque los ha dejado con poca pista para ejecutarlo. Sin embargo, su renuncia ha dado esperanzas a algunos empleados.

“Algunas personas reconsiderarán al 100% irse después de hoy”, dijo un empleado actual. “Y  el aura sombría de escuchar a Emad hablar tonterías durante una hora se ha ido”.

Poco antes de que Mostaque renunciara, un ejecutivo actual de Stability le dijo a Forbes que eran optimistas de que su partida podría hacer que Stability fuera lo suficientemente atractiva como para recibir una pequeña inversión o ser vendida a una parte amigable.

Fuente: Forbes Chile

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