Los creadores de Kigüi descubrieron que los alimentos próximos a vencer en góndola son un problema para las marcas. Y, a partir de eso, desarrollaron un negocio con los consumidores como protagonistas.
En la película Clerks, de Kevin Smith, hay una escena en la que una señora busca la leche cuyo vencimiento sea el más largo. Se la pasa un buen rato descartando botellas hasta dar con esa leche que tarde más en vencer.
Al director, conocido por ser quien primero trabajó con Ben Affleck y Matt Damon, así como también por crear los cameos con Stan Lee que después pasaron a ser la norma en Marvel, no se le ocurrió el sentido contrario: consumidores desaforados por buscar los productos próximos a vencer. Esa idea fue la que dio origen a Kigüi, la app donde los consumidores ahorran y, a la vez, ayudan a evitar el desperdicio de los alimentos.
Kigüi es una aplicación móvil que le permite a los consumidores ahorrar hasta un 60% en alimentos, eligiendo en supermercados de todo el país productos con fechas de vencimiento cercanas. Se lanzó en la Argentina a principios del año pasado, y hasta el momento sus usuarios ahorraron más de $ 10 millones. La aplicación ayudó a reducir el desperdicio de alimentos.
El modelo de negocio se basa en que los productos vencidos retornan al fabricante, el supermercado no pierde nada. “Eso implica que por lo general el supermercado no tiene un interés específico en rotar esos productos, sabe que los puede devolver. Pero para el fabricante eso implica un costo, tanto por la logística como porque esos alimentos se deben tirar. Y para el planeta todo esto es un gran desperdicio”, asegura Maximiliano Dicranian, cofundador y COO, de Kigüi.
Las estadísticas que siguen en Kigüi afirman que el 17% de los alimentos que se producen cada año terminan siendo descartados. El 4% se da en los supermercados, en gran medida por expiración de la fecha de vencimiento o consumo preferente. Por otra parte, el desperdicio de alimentos es responsable del 11% de las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera del planeta.
Los creadores de Kigüi descubrieron que los alimentos próximos a vencer en góndola son un problema para las marcas. Y, a partir de eso, desarrollaron un negocio con los consumidores como protagonistas.
En la película Clerks, de Kevin Smith, hay una escena en la que una señora busca la leche cuyo vencimiento sea el más largo. Se la pasa un buen rato descartando botellas hasta dar con esa leche que tarde más en vencer.
Al director, conocido por ser quien primero trabajó con Ben Affleck y Matt Damon, así como también por crear los cameos con Stan Lee que después pasaron a ser la norma en Marvel, no se le ocurrió el sentido contrario: consumidores desaforados por buscar los productos próximos a vencer. Esa idea fue la que dio origen a Kigüi, la app donde los consumidores ahorran y, a la vez, ayudan a evitar el desperdicio de los alimentos.
Kigüi es una aplicación móvil que le permite a los consumidores ahorrar hasta un 60% en alimentos, eligiendo en supermercados de todo el país productos con fechas de vencimiento cercanas. Se lanzó en la Argentina a principios del año pasado, y hasta el momento sus usuarios ahorraron más de $ 10 millones. La aplicación ayudó a reducir el desperdicio de alimentos.
El modelo de negocio se basa en que los productos vencidos retornan al fabricante, el supermercado no pierde nada. “Eso implica que por lo general el supermercado no tiene un interés específico en rotar esos productos, sabe que los puede devolver. Pero para el fabricante eso implica un costo, tanto por la logística como porque esos alimentos se deben tirar. Y para el planeta todo esto es un gran desperdicio”, asegura Maximiliano Dicranian, cofundador y COO, de Kigüi.
Las estadísticas que siguen en Kigüi afirman que el 17% de los alimentos que se producen cada año terminan siendo descartados. El 4% se da en los supermercados, en gran medida por expiración de la fecha de vencimiento o consumo preferente. Por otra parte, el desperdicio de alimentos es responsable del 11% de las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera del planeta.
La propuesta es que sean los consumidores quienes optimicen el consumo de los alimentos recibiendo una recompensa a cambio. Al elegir alimentos próximos a vencer (entre 15 y 90 días dependiendo el producto), el consumidor puede luego en su casa sacar una foto antes de abrir el alimento donde se vea su fecha de vencimiento y el recibo del supermercado. Con esa información Kigüi le da un reintegro que va de 10% a 30% de acuerdo al tipo de producto seleccionado.
La propuesta tiene a los principales supermercados habilitados, y la empresa ya tiene oficinas en México, donde han notado “un gran entusiasmo, vimos que el mercado respondió muy bien y estamos creciendo muy fuerte”, señala Dicranian.
En la Argentina la experiencia indica que los usuarios de Kigüi compraron en supermercados de todo el país más de 100.000 productos, con un ahorro promedio del 20%. Los productos más elegidos fueron yogures, panificados, golosinas, quesos y bebidas (cervezas y gaseosas principalmente), a los que todavía les faltaban 20 días, en promedio, para llegar a su expiración.
Por ejemplo, para un yogurt, con un precio promedio de $ 180, la app devuelve hasta un 30%, por lo que los usuarios terminan pagando $ 126. En caso de productos más costosos, como los panes de mesa, con un reintegro de 20%, los usuarios pueden recibir más de $ 170. Además, con Kigüi se pueden acumular promociones, por lo que el ahorro aún pueden ser mayor.
El funcionamiento de Kigüi es muy sencillo y efectivo: cuando un consumidor encuentra en un supermercado un producto cercano a la fecha de vencimiento en vez de hacerlo a un lado en la góndola, lo elige y paga menos por ese alimento. Solo tiene que cargar una foto del empaque y del ticket, y en 72 hs tiene el dinero acreditado en su cuenta, mediante CBU o CVU.
Kigüi trabaja con 10 amplias categorías: Lácteos, Panes, Gaseosas, Cervezas, Snacks, Almacén, Masas, Carnes y Postres. En fechas especiales se generan nuevas categorías destacadas que llevan reintegros mayores a los habituales. Si bien trabaja con una gran variedad de marcas, en la Argentina se unieron a la causa contra el desperdicio de alimentos, empresas como Bimbo, Las Tres Niñas, ilolay y Dulcor.
El desafío de la startup pasa por ser una plataforma eficiente para lo que se denomina un “two sided market”, o mercado de dos lados. Por un lado sumar fabricantes y sus productos para que siempre haya la oportunidad de encontrar ofertas, y por el otro que los consumidores se suban a la app.
Por otra parte Kigüi les permite a los fabricantes empezar a entender a sus clientes ya que los datos muestran patrones de comportamiento que pasan desapercibidos para los sistemas actuales. El desafío ahora es seguir expandiéndose por América Latina.
Fuente: Forbes Argentina