América Latina es probablemente la región más golpeada por la pandemia. De acuerdo a los resultados de una reciente encuesta realizada por BNP Paribas Cardif e Ipsos, nueve de cada diez latinoamericanos han sufrido al menos una consecuencia financiera negativa durante este proceso.
La pérdida de ingresos ha provocado que entre seis y siete de cada diez personas cancelen o pospongan una compra importante. En esa línea, un porcentaje significativo de la población ha tenido o espera tener problemas para pagar sus deudas.
Como se esperaba, el Covid-19 ha aumentado significativamente las preocupaciones de las personas, principalmente ligadas a enfermedades y pérdida de ingresos: el 76% de las personas encuestadas en todo el mundo señaló que “estaban preocupadas por la salud” y el 76% por una posible pérdida de ingresos; sin embargo, hubo grandes disparidades entre las regiones geográficas.
Antes de la crisis sanitaria, América Latina era la región donde los sentimientos de vulnerabilidad eran más altos. La región se ha visto significativamente afectada (aumento en el número de casos de Covid-19, aumento en el desempleo), lo que se traduce en un aumento de los temores sobre enfermedades (86%, +8 puntos en comparación con 2019), así como la capacidad de mantener los ingresos (87%, +5 puntos respecto a 2019).
El riesgo de desempleo merece una atención especial porque condiciona el sentimiento generalizado de lo bien protegidas que se sienten las personas, que comparten la sensación de no estar suficientemente protegidas al expresar con frecuencia temores por la preocupación por la posible pérdida del empleo. En particular, la población de los países latinoamericanos quiere una mejor protección contra el desempleo.
Asimismo, el 54% de los latinoamericanos siente que no está lo suficientemente protegido. La demanda de mayor protección es significativa en todo el mundo, porque está alineada con el reconocimiento de riesgos
Las personas expresaron la necesidad de una mayor cobertura, particularmente en el caso de enfermedad grave (58%), accidente (56%), hospitalización (50%), muerte (50%), pérdida de un trabajo (50%).