Fuente: Diario Financiero
En su rol de inversionista ángel de los emprendimientos Khipu, app para pagos móviles y Cumplo, red de finanamiento colectivo, Luis Hernán Paul, quien además es académico de la Universidad Católica y director de empresas, señala que el principal desafío es que las compañías tradicionales apoyen el desarrollo de emprendimientos en Chile.
Comenta que en los últimos 20 a 30 años, históricamente las firmas establecidas han tenido poca relación con el mundo emprendedor, lo que no es conveniente desde el punto de vista del desarrollo del país y de las mismas compañías.
«En otros mercados, como el estadounidense, sí hay una interrelación, y ésta potencia la innovación en las empresas tradicionales y se convierte en un apoyo para el desarrollo de las startups».
-¿Por qué este apoyo no se da en Chile?
-Ha faltado la reacción del mundo empresarial tradicional, de forma directa o a través del aporte de la experiencia, entendiendo que esto genera distintos beneficios, no sólo económicos.
-¿Cómo ha impactado el escenario económico a la integración de las startups al sistema?
-Desde el punto de vista macro, el peso que tiene el emprendimiento en el PIB de Chile todavía es muy menor. Pero la experiencia internacional refleja que en la medida que se empieza a producir esta integración, sí puede tener un impacto relevante. Las startups son clave para fortalecer la innovación en las empresas tradicionales.
-¿Qué compañías están avanzado en este camino?
-Hay algunas que están realizando este tránsito, tal como se ve en el extranjero, por ejemplo Telefónica y Bci, que están invirtiendo en startups, pero no es una práctica generalizada.
-¿Cuál es la principal barrera que tienen las empresas tradicionales para generar este cambio?
-Sin duda hay un tema generacional y cultural. Mientras más joven es la gente que participa en el mundo empresarial tradicional, es más fácil que se relacione con el mundo de las startups. En Chile estamos viendo un recambio generacional en varias compañías, lo que está ayudando a este proceso. Aunque hay excepciones de empresarios que tienen más de 60 y que son muy abiertos a esta tendencia.
-¿Cómo podría incentivarse el apoyo a emprendimientos?
-Hay dos caminos, uno es por la vía de la inversión, donde está la alternativa que sea la propia empresa la que realice la inversión o a través de sus ejecutivos, como ha sido mi experiencia. El segundo camino es la asociación y entrega de apoyo, por ejemplo, convirtiendo a la star-tul, en proveedor de la compañía o desarrollando negocios en conjunto.
-¿Qué industria muestra un mayor avance?
-A nivel mundial, la industria financiera ha entendido que las Fintech (financial-technology) son jugadores relevantes y han comenzado un proceso de integración, pasando de ser competidores a trabajar de forma complementaria.
-A nivel local, ¿cómo ha reaccionado la banca?
-Ha ido evolucionando positivamente pasando de una posición de limitar a estos nuevos jugadores, argumentando que no cumplían los requisitos de la regulación, a una posición de analizar las posibilidades y capacidades que aportan las Fintech a su negocio. Aquí hay valor, ya que desde el punto de vista de los clientes están aportando a la entrega de un mejor servicio. Hay algunos bancos que están más adelantados en ese aprendizaje.
-¿Qué deberían tener en cuenta los inversionistas al momento de apostar por las startups?
-En el camino puede ser que algunos tengan retornos y rentabilidades bastante atractivas. Pero, cuando hago esta invitación a invertir, es importante considerar que los emprendimientos tienen bastante riesgo, entonces el inversionista debe hacerlo con recursos marginales que estén dispuestos a perder.