Mayor capacidad, velocidad, menores costos y más datos han configurado un proceso multiplicador de innovación que está permitiendo a las empresas generar más valor y a los consumidores ganar en bienestar, gracias a la mayor capacidad de sopesar y elegir calidad-precio entre más productos y oferentes. Y la banca no es ajena a esta transformación.
Pero también será importante la forma como los bancos son capaces de transformarse en un jugadores ligeros para enfrentar a los actores nacidos en Internet.
BBVA a nivel global y en Chile es una de las entidades financieras que viene trabajando de manera seria durante los últimos años para llevar a cabo un cambio que en la entidad consideran urgente y fundamental: pasar de ser un banco analógico, eficiente y rentable a una empresa digital, desarrollando un modelo de negocio más eficiente, flexible y basado en el conocimiento.
“Aspiramos a liderar la banca digital y poner al alcance de todos los oportunidades de esta nueva era
Y en este proceso, BBVA Chile ya registra algunos logros: en 2015 su aplicación BBVA Wallet, que permite a los clientes gestionar en línea desde un Smartphone todas las transacciones realizadas con tarjetas de crédito y débito, fue distinguida como la más innovadora del país por Global Banking and Finance Review.
A abril de 2016, esta aplicación que además de Chile está presente enEstados Unidos, México, Turquía y España, ya superaba las 3,5 millones de descargas a nivel global.
La gestión digital le ha valido a BBVA Chile obtener además otros importantes reconocimientos, como ser reconocido entre las 50 empresas más innovadoras del país, según el ranking de la Percepción de Innovación elaborado por la Universidad Adolfo Ibáñez y Best Place to Innovate; y el primer lugar en la categoría servicios financieros y banca on line en los E-Commerce Awards.
Eduardo Olivares, gerente de la División Banca Digital de BBVA Chile.
-¿Qué están haciendo en BBVA para liderar la banca digital?
-BBVA viene desde hace varios años trabajando en su transformación digital: tras construir los cimientos de su proyecto -las plataformas- y una nueva estructura más ágil, ahora está acelerando en la creación de nuevos productos y servicios para los clientes del siglo XXI. Y el lanzamiento de BBVA Wallet tanto en Chile como en otros mercados donde el Grupo está presente se enmarca en esta estrategia.
Como recoge muy bien nuestro propósito global como compañía, lo que queremos es ‘poner al alcance de todos las oportunidades de esta nueva era’.
-Y en Chile, ¿cómo está marchando este proceso de digitalización del banco?
-De verdad muy bien, y con una muy positiva respuesta de los clientes que ya perciben a BBVA Chile como uno de los líderes en banca digital gracias a nuestra gestión de los últimos años: en 2012 lanzamos al mercado una de las primeras app nativas el sistema financiero chileno; en 2013 fuimos el primer banco en contar con un sitio web responsivo, que se adapta a cualquier tipo de dispositivo digital (tablet, desktop, teléfono móvil); y en 2014 fuimos pioneros en implementar un sistema de mensajería o avisos a través de la app del banco, que avisa a los clientes del vencimiento de sus cuentas de servicio, abonos de sueldo, depósitos de cheques, etc.
También inauguramos un chat en línea vía web para resolver dudas y consultas de nuestros clientes durante las 24 horas del día e iniciamos las ventas digitales. Todo ello además del ya comentado del lanzamiento de BBVA Wallet, la primera app que permite a los clientes llevar un control en línea, desde su teléfono móvil, de todas a las transacciones realizadas con sus tarjetas.
-¿Cómo se ha traducido este proceso de digitalización en el negocio?
En 2015, las ventas por canales digitales se multiplicaron 4,5 veces y en 2016 la comercialización de productos de consumo por esta vía ya bordea el 30% y en depósitos a plazo llega a un 75%.
A nivel de clientes, un 90% de los cuentacorrentistas se relacionan con el banco por canales digitales.
-¿Cuáles son los proyectos futuros?
-Vamos a seguir impulsando en Chile y a nivel toda la región la transformación digital de los procesos y servicios bancarios con el objetivo hacer la vida más fácil a nuestros clientes y poner al alcance de todos las oportunidades de esta nueva era. Esta estrategia nos permitirá atraer más clientes, satisfacer mejor sus necesidades, ofrecer un mejor servicio, incrementar la cuota de negocio y mejorar en eficiencia y rentabilidad.
