Por: Gustavo Anania, Gerente General RedCapital.cl
A lo largo de los últimos años, hemos sido testigos de los vertiginosos cambios que está generando la tecnología en todos los ámbitos de la sociedad. Las inversiones y las finanzas no han quedado ajenas a estas enormes innovaciones. Sumado a ello, los instrumentos tradicionales de inversión no han tenido rentabilidades atractivas, lo que ha generado que muchos inversionistas estén buscando nuevas alternativas para rentabilizar su dinero.
A continuación, resumiré de manera simple algunos de esto nuevos instrumentos comparándolos con los más tradicionales.
Inversiones en renta variable
Uno de los instrumentos que siempre llama la atención es la compra de acciones de compañía listadas en la Bolsa de Comercio de Santiago. La bolsa ha tenido buena rentabilidad el último tiempo, pero se ven variaciones importantes entre los resultados de los distintos papeles. Por lo tanto, estas inversiones no son recomendadas para personas que no tienen el tiempo de estar informados para tomar decisiones a tiempo. Si bien una forma de mitigar este problema es invertir pensando en el largo plazo en compañías con buenas perspectivas, aun así implica estar atento, ya que no se puede asegurar el futuro de ninguna empresa.
Otra alternativa segura es invertir en fondos mutuos accionarios, los cuales al diversificar en distintos instrumentos permiten reducir el riesgo. Sin embargo, hay veces en que estos fondos poseen una variación importante. Son pocos años en los que la Bolsa ha tenido rentabilidades atractivas (sobre un 15%), sin considerar el riesgo implícito, ya que su comportamiento resulta impredecible. La incertidumbre es grande porque son muchas las variables que influyen: No sabemos qué va a pasar con la economía local, con las tasas, con el precio del cobre, con la economía de China, Estados Unidos, etcétera.
Los mismos beneficios y riesgos se presentan en fondos mutuos accionarios que invierten en Títulos en el extranjero. Pero es una forma de diversificar el riesgo local, por lo que la recomendación general es aumentar la exposición en fondos internacionales que tengan mejores perspectivas. Por otra parte, gracias a la tecnología es factible invertir directamente en acciones u opciones en el extranjero, pero son alternativas más complejas para el inversionista en general.
Otra forma de invertir en empresas es comprar participación (acciones) de compañías de menor tamaño con buenas proyecciones. Se puede acceder a través de plataformas de Crowdfunding (financiamiento colectivo) de Equity o de Redes de Inversionistas Ángeles. También se puede invertir en fondos de Capital de Riesgo que diversifican en varias compañías.
Otra alternativa en renta variable son las Monedas. El dólar, por ejemplo, ha estado a la baja en los últimos años y existe incertidumbre sobre cómo debería evolucionar los próximos meses (mejora economía chile vs tasa de interés en USA). También tenemos los Contratos por Diferencia de Monedas, donde los más conocidos son Forex. Estas son alternativas de inversión más complejas y con altos riesgos involucrados. Las Criptomonedas aumentaron fuertemente su popularidad el 2017, pero además de los riesgos que poseen las otras monedas, tiene una carga de incertidumbre, ya que su valor actualmente es fuertemente especulativo.
También existen otras opciones en renta variable, una de estas son las materias primas, como el oro. Hay algunos índices y otros tipos de alternativas en el extranjero para invertir de forma indirecta en monedas, pero están enfocadas en inversionistas más sofisticados o que requieren asesorías externas de un family office o de alguna empresa de inversiones con experiencia.
Inversiones en renta fija
Los fondos mutuos de renta fija, a pesar de que son muy seguros, poseen una muy baja rentabilidad, inferior al 5,0% anual (renta fija chilena mayor a 365 días).
Otra opción de inversión son las propiedades, que en general rentan entre un 5% y un 7% anual. Esta rentabilidad mejora en lugares donde pueda existir mayor plusvalía del inmueble. Si bien la rentabilidad aumenta al apalancarse, esto también aplica para todas las opciones de inversión, no solo para las propiedades, aunque en ningún caso es recomendable endeudarse para invertir, sobre todo en renta variable.
En Chile, hasta hace algunos años no contábamos con muchas alternativas de inversión en renta fija. Hoy, en cambio, gracias a la tecnología están disponibles nuevos instrumentos de inversión, a los que antes solo podían acceder personas con mucho capital. Esto se logra a través del Crowdfunding (financiamiento colectivo). Un ejemplo, es invertir en préstamos, esto se conoce como Crowdlending. Algunas plataformas permiten invertir en diversos instrumentos de deudas con garantías, donde la rentabilidad es mayor que en fondos mutuos o al invertir en propiedades.
El inversionista debe elegir una plataforma que trabaje con buenas garantías de los solicitantes de crédito y que realice validaciones de sus estados financiero. Para acotar los riesgos recomendamos mirar el historial de la plataforma de Crowdlending donde desees invertir. En este tipo de instrumentos, debes considerar la liquidez, dado que la mora es parte del negocio. En promedio los pagos demoran 15 días adicionales a los acordados originalmente y en algunos casos estos tiempos se alargan por meses. Aunque generalmente en estos casos la rentabilidad del inversionista aumenta por la tasa de mora que se aplican, es importante que cuentes con la liquidez para no estar dependiendo de estos capitales.
En próximas publicaciones entraré en más detalle sobre los beneficios y riesgos de esta alternativa de inversión.
Recomendaciones:
Diversificar es sumamente relevante no solo dentro de una opción de inversión, ya que siempre se recomienda que tu dinero esté en distintos distintos instrumentos, aunque tengas muy buenos resultados con alguno en particular. Recuerda que en ningún caso las rentabilidades pasadas aseguran los resultados futuros. Otro tema importante que debes considerar es la liquidez de cada instrumento, debes invertir parte de tu capital pensando en las necesidades de capital que podrías tener los próximos meses.
