Esta tecnología permite triangular la posición de un dispositivo por medio de su GPS, ofreciendo información en tiempo real del entorno geográfico del usuario. Esto permite personalizar los mensajes en base al contexto real en el que se encuentra el usuario.
Varias compañías están utilizando la geolocalización para recoger información. Sin embargo, hasta ahora el gran destino de esa recopilación de datos se enfoca a estrategias que mejoran la experiencia del cliente con las marcas y productos ofrecidos.
Su uso abre opciones en la relación con el cliente, y por lo tanto, una oportunidad enorme a los modelos de negocios y cómo estos se posicionan en el mapa. Con servicios como Google o My Business, las empresas pueden dar visibilidad a sus locales ofreciendo información actualizada y posibilidad de registrar visitas, valorarlas, y compartir la información con sus contactos. Finalmente esto se traduce en una mejora de la experiencia para los clientes, a través del uso de datos de localización, al personalizar esta experiencia y ofrecer contenidos específicos a sus consumidores.
La clave para ofrecer un servicio más individual es comprender y adaptarse al cliente. La posibilidad de llegar de manera más directa, completamente adaptada a sus necesidades del momento, es una oportunidad única para que las empresas lleguen a clientes cambiantes.
El secreto del potencial éxito de la geolocalización es que los usuarios perciban tanto el valor de la aplicación como de los servicios ofertados como respuesta. A mayor valor agregado, mayores serán las posibilidades de que un usuario permita que se le geoposicione y se interactúe con él. Ante una demanda de usuarios cada vez más sofisticados y exigentes y que buscan una experiencia individualizada, la geolocalización es una herramienta de oportunidades que provee de información para responder anticipadamente a las necesidades de sus clientes y que también brinda “la ocasión” de localizar publicidad específica, ofertas a medida, etc.
Pokémon Go puede ser una moda pasajera, pero quedará en la historia de los negocios como una de las grandes lecciones sobre el potencial de las tecnologías de geolocalización para atraer y fidelizar a consumidores a través de una experiencia única.