En 2024 Ipsos llevó a cabo un estudio de mercado con el objetivo de comprender mejor cómo la gente en Latinoamérica utiliza diferentes medios de pago, sus percepciones de valor y las barreras que enfrentan.
En México el uso de los medios de pago es muy variado. En promedio, cada persona tiene 4.5 medios de pago, en línea con el promedio de Latam. Las tarjetas de débito son las más comunes, con un 82% de penetración, superior al promedio de Latam, pero por debajo de lo que se observa en Chile 92%, benchmark para América Latina. Les siguen las transferencias bancarias al 59% y las tarjetas de crédito físicas al 54%. Las apps de pago, aunque más recientes, ya alcanzan un 42% de penetración, por debajo del promedio de Latam de 53% y significativamente menor que Argentina, quien lidera con 81% de adopción.
Algo que llama la atención es que el efectivo que sigue vigente prácticamente en toda la población mexicana (97%); siendo el país de Latinoamérica donde se tiene la mayor incidencia, lo que se traduce en 7% más que el promedio de América Latina, aún si Brasil, país con menor incidencia, todavía es utilizado por el 76% de la población. Sin embargo, un 30% ha reportado que su uso ha disminuido, lo que sugiere un movimiento gradual hacia opciones más digitales.
Aislando al efectivo, la tarjeta de débito es el medio más predominante, con un 69% de uso frecuente. Es la preferida para compras tanto en tiendas físicas como en línea, y también ha visto un aumento en su uso para pagos automáticos, alcanzando un 52%, 15 puntos porcentuales arriba del promedio de Latam.
Por otro lado, las tarjetas de crédito virtuales están ganando terreno, con un aumento del 64% en su uso en comparación con el año pasado, especialmente en pagos en línea.
Las apps de pago han conquistado un lugar en los corazones y teléfonos de los mexicanos. Un 93% de los encuestados tiene al menos una app de pago instalada. Paypal es la más reconocida, alcanzando un 67%, seguida de cerca por Mercadopago con un 52% quien es líder principalmente en Chile y Argentina.
A pesar de esta alta adopción, las apps enfrentan un reto significativo en cuanto a retención. Hay un índice de pérdida promedio del 41%, lo que significa que, aunque las personas están dispuestas a probar nuevas apps, no siempre se quedan.
Sin embargo, el futuro parece brillante, ya que un 60% de los usuarios muestra disposición a incrementar el uso de tarjetas digitales y apps de pago, lo cual es un buen indicativo de la transición hacia la digitalización, en donde México es líder, por arriba del promedio de Latam (82%).
Los principales drivers para adoptar nuevos medios de pago son la facilidad de uso (79%) y la seguridad (51%), ligeramente superior al promedio de Latam: 82% y 46% respectivamente. La gente valora la simplicidad y se siente más atraída por opciones que garantizan protección contra el fraude.
No obstante, hay barreras que frenan la adopción, como los costos de mantenimiento (46%) y la falta de aceptación universal. Los usuarios buscan opciones que ofrezcan beneficios claros y costos transparentes.
El fraude es una sombra que acecha a todos los consumidores. El 52% de los encuestados ha experimentado intentos de fraude, más que el promedio de Latam de 47%, especialmente en el uso de tarjetas de débito (20%) y crédito (15%). Esto afecta la confianza de los usuarios en los sistemas de pago.
La seguridad sigue siendo una preocupación central. Un 36% de los usuarios teme que, en caso de fraude, tendrían que asumir la pérdida económica ellos mismos. Sin embargo, hay un rayo de esperanza, ya que los códigos de seguridad dinámicos son vistos positivamente por un 94% de los usuarios, lo que ayuda a reconstruir la confianza y donde México lidera este nivel de seguridad con 9 puntos porcentuales arriba del promedio de América Latina.
En resumen, aunque el efectivo sigue dominando el panorama, hay un crecimiento notable en la adopción de medios digitales. Las instituciones financieras deben concentrarse en mejorar la experiencia del usuario y ofrecer incentivos claros para aumentar la retención. Además, mejorar la percepción de seguridad mediante una comunicación clara sobre las medidas de protección podría aumentar la confianza del usuario y reducir la incidencia de fraude.
En Ipsos contamos con insights y estrategias que pueden ayudar a las instituciones financieras a adaptarse mejor a estas tendencias.
El estudio “Medios de pago 2024” se realizó entre el 24 de junio y el 19 de julio de 2024. Para México en particular, se realizaron 800 entrevistas a hombres y mujeres de entre 18 y 60 años, quienes realizan pagos o compras personales o familiares a través de un panel online.