Fuente: El Clarín
A diferencia de otras épocas, donde los avances tecnológicos evolucionaban en forma previsible, los cambios que se avecinan para el final de la segunda década de este milenio, superarán toda capacidad de predicción, aseguran los analistas. De acuerdo a diferentes pronósticos del MIT, la consultora Gartner, durante 2019 se consolidará la tendencia de los teléfonos plegables, la computación cuántica, la traducción simultánea y los microchips que se conectan con el cerebro.
La era de los teléfonos flexibles
La curva de innovación en la industria móvil llegó a un punto tal de saturación que, salvo excepciones, todos los teléfonos se terminan pareciendo entre sí. Las pantallas plegables podrían romper ese estancamiento ya que, como afirman en Digital Trends, varios fabricantes anunciaron oficialmente que están trabajando en su implementación comercialy este año habrá grandes novedades.
En noviembre, durante la Conferencia de desarrolladores, Samsung mostró un prototipo del Infinity Flex Display, la tecnología que permitirá “abrir” el celular como si fuera un libro y que su modelo definitivo sería presentado este año. Sin embargo, el FlexPai, de la californiana Royole, fue el primero en exhibir una pantalla que se dobla al medio. Podría salir a la venta durante los próximos meses.
A esta avanzada se suma Huawei, que tendrá su propio smartphone plegable. El CEO de la compañía, Richard Yu, confirmó la novedad. Todo parece indicar que su nuevo modelo se expondrá en la edición 2019 del Mobile World Congress, el mes que viene. A esta carrera también se subirá LG, con un anuncio inminente.
Traducciones en tiempo real
Lograr comunicarse con una persona que hable alguna de las lenguas bantúes -o cualquier otro idioma del planeta- está cada vez más cerca gracias a los sistemas de traducción simultánea. De acuerdo al MIT, los auriculares Pixel Buds de Google, son una de las tecnologías emergentes con mayor potencial.
Así, durante una conversación, si el interlocutor pronuncia una frase en sueco, el receptor, que debe tener los mismos auriculares, podrá escuchar lo que dice en cualquiera de los 40 idiomas disponibles. Para activar estas opciones hay que darle un pequeño golpe al auricular derecho para que “despierte” al asistente que responde a los comandos de voz. Sin embargo, todavía están lejos de lograr una traducción convincente, revelaron diferentes sitios especializados.
Con una tónica semejante, los Mymanu Click se sincronizan entre sí mediante Inducción Magnética de Campo Cercano (NFMI), una conexión más estable y segura que bluetooth. Fujitsu concibió Live Talk, un micrófono que realiza diecinueve traducciones simultáneas. Mientras que la startup Travis desarrolló un aparato pensado para viajeros, que cabe en la palma de la mano y reconoce 80 idiomas.
Computación cuántica
Mientras Microsoft, IBM y Google buscan dar con el primer modelo comercial de una computadora cuántica (CC) la consultora Gartner identificó esta tendencia como una de las próximas disrupciones tecnológicas. Y señaló que en 2019, la competencia para lograr la supremacía de esta supercomputadora se intensificará.
Estas máquinas son aptas para resolver problemas de alta complejidad técnica ya que, en lugar de algoritmos, utilizan la mecánica cuántica, una rama de la física que trata el comportamiento de partículas subatómicas. Se podrán aprovechar para descubrir nuevos materiales, desarrollo de fármacos o realizar predicciones meteorológicas de gran precisión.
Y mientras la computación clásica se rige por un sistema binario (0 y 1) la CC lo hace a través de cúbits (bits cuánticos), que no solo operan en 0 o 1 sino también en ambos estados a la vez. Así, gracias a propiedades como la superposición y el entrelazamiento cuántico, los cúbits pueden realizar muchas más operaciones, con asombrosos resultados.
En 2018, Google confirmó una CC de 72 cúbits, IBM una de 50 cúbits e Intel una de 49 cúbits. Mientras que en el Laboratorio Aeronáutico de Cornell implementó, semanas atrás, un perceptrón, la unidad básica de las redes neuronales del aprendizaje profundo, en un procesador cuántico de cinco cúbits.
Enlace mental
Las innovaciones tecnológicas como el Neuralink de Elon Musk y otras interfaces cerebro-computadora (BCI) podrán mejorar la inteligencia humana, la memoria y la comunicación, según el sitio Brain Computer Interfacing. Intel ya anticipó que en breve será posible colocar un microchip en el cerebro y almacenar datos o realizar activaciones neuronales.
“A partir del lanzamiento del chip de prueba Loihi -el primero de su tipo- es que Intel conformó una Comunidad de Investigación Neuromórfica (INRC) cuyo principal objetivo es avanzar en las investigaciones relativas a esta tecnología. Este tipo de arquitecturas reflejan cómo las neuronas del cerebro se comunican y aprenden de una forma que puede ser regulada en tiempo real. Pueden organizarse solos y responder en base a patrones y asociaciones aprendidas previamente. La meta es que un día estos pequeños componentes sean capaces de asimilar información de una manera tan rápida y eficiente como lo hace nuestro cerebro”, apuntó Mariano Yacovino, de Intel.
En esta línea, un equipo de la Universidad de Rice, en EE.UU., está desarrollando un chip que se implanta en el cerebro para que lea señales de algunas neuronas ligadas a la vista y el oído y las transmita para ayudar a revertir la ceguera y la sordera.
Quinta generación móvil
Para que estas y otras tecnologías florezcan, será necesaria una conexión de banda tan ancha como es el 5G, que este año iniciará su ascenso. Esta tecnología inalámbrica permitirá que las velocidades de la red sean hasta 1.000 veces más rápidas. El ancho de banda se expanda para admitir nuevos tipos de contenido, como realidad mixta y video 360 o contenido 4K.
“El gran diferenciador para 5G no es el factor de velocidad, es la latencia (retardo)”, explica Iain Preston, director ejecutivo de la consultora especializada R/GA EMEA .
Internet de las cosas, el blanco de los hackers
Uno de los vectores más preocupantes, según Kaspersky Lab, son los ataques a los softwares de las cadenas de producción de empresas. Los hackers ya son capaces de comprometer el soft con una actualización de sistema para evadir controles de prevención. Se espera que tanto la frecuencia y gravedad de estos ataques aumenten.
Además, las botnets de la Internet de las cosas (ejércitos de robots compuestos por electrodomésticos y otros objetos) seguirán creciendo a un ritmo imparable ya que no existe una norma que regule a los dispositivos que se conectan. Por otro lado, el machine learning, como tecnología que se basa en el proceso de una gran cantidad de datos, indican desde Eset, puede ser utilizada para desarrollar tareas automatizadas y obtener información de blancos vulnerables.