Fuente: www.elconfidencial.com
Si crees que sabes oler una estafa a kilómetros, no te confíes: los nuevos embaucadores del bitcoin manejan internet mejor que nadie. Estos son algunos de sus trucos para que no te huelas la tostada.
Se ha convertido en la nueva fiebre del oro: no hay día que no hablemos del bitcoin, de su volatilidad y de la gente que, cada vez más, apuesta por invertir su dinero en esta y otras criptomonedas. Y cuando todo el mundo mueve su dinero hacia un activo que no para de crecer y que poca gente realmente entiende… las posibilidades de estafa aumentan de manera exponencial. En España ya se ha producido un caso sonado, con hasta 4,6 millones de euros supuestamente defraudados.
No es nada nuevo: cualquier industria está expuesta a posibles engaños. Sin embargo, en el terreno del bitcoin, los amigos de lo ajeno cuentan con un nuevo aliado: internet. Aunque creas que sabes detectar una estafa a kilómetros, lo cierto es que los nuevos embaucadores saben manejar internet mejor que nadie, y se moverán en este terreno desplegando una serie de artimañas que no son, ni mucho menos, fáciles de detectar por el ciudadano medio. Si tienes dudas, he aquí algunas de las estrategias ‘online’ más usadas por aquellos que querrán convencerte de que inviertas en bitcoin, quedarse con tu dinero… y desaparecer lo antes posible.
1) Comprar la ‘mala reputación’ y hacerla buena
Imaginemos el nombre de una plataforma ficticia: Bitfriends Investors. En Bitfriends Investors saben que llegará un momento en que sus clientes se piensen que todo es una estafa y acaben buscando información en Google. Un consultor SEO madrileño, que en ocasiones ha recurrido a este tipo de prácticas con sus propios clientes, nos cuenta las tres cosas que pueden hacer para apropiarse de la mala reputación y darle la vuelta:
A. Crear contenido propio
En la empresa saben que la gente buscará en Google cosas como ‘Bitfriends Investors estafa’, de modo que crearán varios artículos en blogs y foros cuyo titular sea: «¿Es Bitfriends Investors una estafa?». Al ver ese titular, el cliente pensará que ya ha encontrado las pruebas que buscaba, pero lo cierto es que, aunque ese artículo empiece diciendo que va a analizar las causas del posible fraude, según avance en su narración acabará diciendo que no, que en realidad es una inversión totalmente inteligente y con unos beneficios asombrosos. «Yo he escrito varios artículos así«, nos cuenta el consultor SEO. «Con eso conseguíamos que los artículos que de verdad decían que nuestro cliente era una estafa acabasen en la segunda o tercera página de resultados de Google, y nadie llega hasta allí, la gente solo lee los primeros resultados».
Los estafadores crearán artículos para desmentir la estafa y los colocarán en las primeras posiciones de los buscadores
A poco que husmees, verás que ese blog tan solo tiene un artículo (el dedicado a Bitfriends Investors), y que ese usuario que tanto los defiende en los diversos foros en realidad solo se dedica a hablar de esa empresa. Con esta estrategia, creando varios contenidos que en realidad son suyos, los estafadores habrán conseguido su objetivo: que cuando los usuarios busquen ‘Bitfriends Investors estafa’ en Google, los primeros resultados desmientan esa posibilidad.
B. Pagar a blogueros para que hablen bien de ellos
Puede que crear su propio contenido huela un poco mal, y también puede que eso no les lleve a las posiciones de Google. En ese caso, el consultor nos cambia un poco la estrategia: «Hay muchos blogueros que, si les pagas, publican lo que les digas. No sería la primera ni la segunda vez que pagamos a uno para que en su blog, que está muy bien colocado en Google, escriba un artículo preguntándose si nuestro cliente engaña… para acabar diciendo que no. Lo más probable es que ni siquiera haya escrito él ese artículo, sino que se lo hayan dado hecho».
C. Comprar las palabras ‘Bitfriends Investors estafa’ en Google
Si todo lo anterior ya parece una buena estrategia para esconder la realidad sobre la empresa, aún queda otra que acabará de redondear la operación: pujar en Google por palabras como ‘estafa’, ‘bitcoin’, ‘Bitfriends Investors’ y similares, enlazando a contenido que, una vez más, desmentirá cualquier conato de engaño. «Es probable que los enlaces que salgan primero en Google aparezcan como anuncio», nos cuenta el consultor, «pero nadie se fija en eso».
2) Inversión en bitcoin… y solo en bitcoin
Desde que el bitcoin se convirtiese en la nueva fiebre del oro, son muchas las empresas (totalmente legales) que quieren subirse al carro: fondos de inversión, asistentes financieros, plataformas web que te gestionan la inversión en diferentes activos, etc.
Sin embargo, todas las anteriores tienen dos cosas en común: en primer lugar, llevan años haciendo este trabajo, con lo que se han granjeado una buena reputación; en segundo, ofrecen un amplio abanico de inversiones, no se limitan al bitcoin. Y ahí es donde está la clave: si de la noche a la mañana te encuentras una plataforma que nació hace muy poco y que solo te ofrece invertir en bitcoin… ojo, cuidado.
3) Mensajes inflados y ‘millonarios’
Quizá conozcas el caso de Unete, la estafa piramidal que en 2015 atrapó a decenas de miles de inversores que perdieron 228 millones de euros. Los fundadores de este proyecto, José Manuel Ramírez Márquez y Pilar Otero Sánchez, acabaron en la cárcel.
En sus vídeos, los aparentes emprendedores lanzaban mensajes que en ocasiones aparecían inflados y exagerados, instando a sus clientes a convertirse en «mentes millonarias», a «dejar atrás el miedo» y a formar parte de un proyecto que se presumía millonario. Incluso cuando la Justicia empezó a pisarles los talones, Ramírez Márquez y Otero Sánchez mandaron vídeos a sus inversores instándoles a no dejarse engañar por esa supuesta ‘persecución’. En sus mensajes, ambos deslizaban la idea de ser una especie de ‘libertadores’ que estaban siendo perseguidos, simplemente, por dar a sus inversiones la fórmula mágica para hacerse millonarios en poco tiempo.
4) Rentabilidad asegurada… y exagerada
Si alguna vez has invertido tu dinero para sacarle rendimiento, habrás visto un punto en común que tenían todos tus asesores: ninguno, ni uno solo, te aseguraba al 100% que fueses a ganar dinero. Te recomendaría los mejores activos, te asesoraría en tus inversiones… pero ninguno te aseguró al 100% que fueses a ganar. ¿La razón? Nadie puede hacerlo, ya que las inversiones siempre conllevan un riesgo.
En el caso de potenciales timadores del bitcoin, sin embargo, todo es al contrario: no solo te asegurarán una rentabilidad, sino que de hecho tus beneficios serán exageradamente superiores a los que conseguirías con cualquier otro activo. Tan superiores como para que te plantees por qué no estás invirtiendo ya todo tu dinero en bitcoinS.
Y es que casi ningún sector se escapa de posibles engaños, así que bitcoin no iba a ser una excepción. Pero hay que tener una cosa en cuenta: en todo este juego, tus posibles estafadores manejarán internet mejor que cualquier otra industria, y descubrir sus artimañas no será tan fácil como en principio puedas creer. Todo de cara al objetivo final: coger tus ahorros… y largarse lo antes posible.