Fuente: innovacantabria.com
Que Internet está cambiando el mundo es algo que ya nadie se atreve a dudar. Las posibilidades que ofrece la Red han calado hondo en la forma de trabajar, de comunicarse, de entretenerse, de conocer. Pero si se tiene en cuenta el vertiginoso avance de la tecnología, no es descabellado pensar que el auténtico salto está todavía por llegar.
Dicha revolución es, de hecho, inminente, y tiene mucho que ver con el salto cualitativo experimentado por los teléfonos móviles. La nueva generación de estos aparatos, los móviles 3G, permiten el uso de potentes aplicaciones informáticas combinadas con conexiones a Internet de banda ancha de hasta 2 megas.
Todo ello se está traduciendo en la apertura de un amplísimo abanico de posibilidades que va a transformar las principales tendencias de consumo en la Red. Tanto es así que se calcula que en 2020 los teléfonos móviles serán el principal punto de acceso a Internet.
Cambio de hábitos
Uno de los ámbitos que más van a evolucionar gracias a esta nueva circunstancia tecnológica es el del entretenimiento y afectará a todas sus ramas, desde la música, los vídeos o los juegos, hasta las redes sociales.
En el consumo de música a través de Internet, por ejemplo, un mercado que en 2008 facturó 10,7 billones de dólares a nivel global, las previsiones del sector apuntan a que dicha cifra ascenderá hasta los 17,5 billones en 2012, gracias al desarrollo e implantación de los sistemas de descarga de canciones completas a bajo coste y de las plataformas de suscripción musical.
Algo parecido a lo que va a ocurrir con el consumo de productos multimedia, en especial con los servicios de televisión vía móvil, aunque este sector, inmerso en una guerra por la definición del soporte tecnológico, tardará en despegar.
Por su parte, tanto las redes sociales como los juegos online, dos de los sectores con mayor perspectiva de crecimiento, van a incrementar el nivel de conectividad entre los usuarios y su entorno a niveles difícilmente imaginables.
Gracias a la evolución de los teléfonos móviles y de su capacidad para recibir, gestionar y enviar información, los gráficos e imágenes, el sonido, la jugabilidad o la interactividad están experimentado un salto cualitativo espectacular. Debido a ello, el sector de los juegos online, que en 2008 movió 4,5 billones de dólares en el mundo, podría alcanzar en 2011 los 6,3 billones de dólares de facturación. En cuanto a las redes sociales, basta mencionar que algunas han alcanzado los 200 millones de usuarios y que dicho número no deja de crecer. Actualmente, el valor de una de las más famosas se cifra en 15.000 millones de dólares. Casi nada.
Facilidades empresariales
En cualquier caso, la revolución 3G está extendiendo su impacto a muchos otros sectores, entre los que se cuentan los servicios bancarios o el ámbito laboral. En el primer caso, los nuevos móviles permiten consultar la situación bancaria del usuario o realizar compras, pagos y transferencias desde el terminal. Algo parecido a llevar la oficina bancaria en el bolsillo.
En cuanto a la repercusión de esta revolución en el ámbito empresarial, las potentes conexiones a Internet, acompañadas de las pertinentes aplicaciones informáticas de los móviles, están permitiendo a las empresas gestionar las relaciones con sus clientes y con sus empleados de forma instantánea. Igualmente, gracias a los nuevos terminales ya se pueden controlar de forma remota la maquinaria y los dispositivos publicitarios y de seguridad