El uso de tarjetas de prepago se disparó este verano en Chile. Aunque aún representan un porcentaje menor del total, su crecimiento es el más acelerado del sistema. Y lo más interesante: están llegando a más regiones y nuevos perfiles de usuarios.
Las cifras del verano 2025 confirman una tendencia que se viene cocinando hace rato. Según el último balance del sistema de pagos, las tarjetas de prepago registraron un aumento de 202,3% en transacciones y 191,6% en volumen de ventas respecto al mismo periodo del año anterior. Aunque solo representan el 1,9% del volumen total, su crecimiento no deja de llamar la atención.
“Lo interesante no es solo el número, es la velocidad del cambio”, dice Christian Cepeda, CEO de Kuvasz Solutions. “Hay productos que hace un par de años eran desconocidos y hoy son parte activa del ecosistema de pagos. Eso tiene un valor estratégico enorme para las empresas del sector”.
Y no solo en Santiago. Ciudades como Coquimbo, Isla de Pascua e Iquique registraron alzas en el uso de tarjetas de 26,8%, 25,2% y 13,8%, respectivamente. “La descentralización del consumo digital es uno de los fenómenos más interesantes. El pago digital ya no es exclusivo de las grandes ciudades”, destaca Cepeda.
En paralelo, el comercio electrónico sigue ganando espacio: las ventas online crecieron un 7,7% en comparación con el verano anterior, frente al 2,9% que subió el canal presencial. “Durante años hablamos de omnicanalidad como un ideal. Hoy es una exigencia. Si no estás en digital, simplemente quedas fuera de la conversación”, apunta Cepeda.
El informe también muestra que, aunque el crédito sigue siendo el rey con un 62,5% del volumen total de ventas, las nuevas formas de pago ya se integran sin fricción al consumo diario. “No se trata de que una forma reemplace a otra, sino de cómo conviven y se adaptan al perfil del consumidor”, explica.
En suma, el consumidor chileno se está digitalizando rápido, diversificando sus medios de pago y dejando atrás la idea de que el pago online es solo para unos pocos. Hoy, en cualquier lugar de Chile y con una tarjeta prepago, se puede comprar, pagar o suscribirse con un par de clics.