La tecnología está redefiniendo el panorama empresarial, transformando la manera en que las empresas operan y, al mismo tiempo, reconfigurando el mercado laboral. En este contexto, soluciones como la hiperautomatización, que integran inteligencia artificial (IA) y automatización robótica de procesos (RPA), se han vuelto cruciales para que las organizaciones estructuren datos previamente desestructurados, optimicen procesos y liberen recursos humanos para tareas de mayor valor estratégico.
“La capacidad de transformar datos dispersos en información procesable permite a las empresas tomar decisiones más rápidas y precisas, lo que genera una ventaja competitiva en mercados cada vez más exigentes”, afirma Juan Jorge Herrera, CEO de Rocketbot, scale up chilena líder en RPA.
En ese marco, es que la innovación también juega un rol clave. Es el caso de Rocketbot, que ha desarrollado una suite de IA diseñada para transformar grandes volúmenes de datos desestructurados en información útil, permitiendo su adopción incluso por usuarios sin conocimientos técnicos. Esta herramienta conecta con bandejas de correos electrónicos, documentos y otras fuentes de datos, utilizando algoritmos avanzados para clasificar, analizar y extraer información clave.
Este avance no solo facilita la operatividad diaria de las empresas, sino que también abre nuevas oportunidades de negocio. Por ejemplo, en el sector asegurador, los brokers pueden automatizar la clasificación de pólizas y la extracción de datos clave, como coberturas de desastres naturales, lo que les permite ofrecer opciones de seguros más personalizadas. En el ámbito financiero, empresas que gestionan datos de AFPs pueden agilizar la validación de información y la emisión de órdenes de pago, reduciendo significativamente los tiempos de procesamiento.
Este tipo de herramientas también son útiles en sectores que manejan grandes volúmenes de información desestructurada, como los que trabajan con grabaciones telefónicas o mensajes de WhatsApp. La suite de Rocketbot permite procesar estos datos, extrayendo resúmenes y puntos clave, lo que facilita la gestión de casos y mejora la atención al cliente. “En definitiva, la implementación de estas soluciones no solo optimiza procesos, sino que también permite a las empresas tomar decisiones más rápidas y precisas, mejorando su competitividad en un entorno cada vez más complejo”, comenta Herrera.
El mercado laboral en transformación
La introducción de tecnologías avanzadas tiene también un impacto profundo en el mercado laboral. Si bien es cierto que la automatización de tareas repetitivas y manuales plantea desafíos para ciertos roles tradicionales, también abre un abanico de posibilidades para el trabajador del futuro.
La automatización ya está sustituyendo trabajos que antes eran ejecutados por personas, como la clasificación de correos o la revisión de documentos, pero simultáneamente está generando nuevos roles especializados en áreas como la supervisión de sistemas automatizados y el desarrollo de soluciones inteligentes.
En este sentido, Herrera afirma: “La clave está en la capacitación y en la adaptación constante. Los trabajadores que puedan adquirir competencias tecnológicas y desarrollar habilidades complementarias tendrán un lugar asegurado en este nuevo ecosistema”. Los nuevos trabajos como líder de automatización, analistas de procesos, analistas de automatización, eficiencia operativa, por nombrar algunos, requerirán habilidades tanto tecnológicas como humanas, y aquellos capaces de trabajar en entornos altamente digitalizados estarán mejor posicionados.
Un concepto clave para entender este cambio en el mercado laboral es el de los «trabajadores digitales». Según el CEO de Rocketbot, este concepto integra la “parte física” del trabajo humano con robots (RPA) y la “parte cognitiva” con inteligencia artificial, dando paso a una nueva generación de trabajadores híbridos. Estos “trabajadores digitales” permiten a las empresas operar de manera más eficiente, combinando lo mejor de las habilidades humanas y la tecnología. “Este enfoque no busca imitar robots humanoides, sino desarrollar soluciones digitales altamente funcionales que complementen y potencien el trabajo humano”, destaca Herrera.
Además, el avance hacia un entorno laboral más automatizado y digitalizado requiere una colaboración activa entre empresas, gobiernos y centros educativos. “Las alianzas institucionales son fundamentales para garantizar una adopción equitativa y sostenible de estas tecnologías”, sostiene el ejecutivo. De hecho, Rocketbot se encuentra explorando alianzas con instituciones académicas de prestigio, como la Universidad Católica, para avanzar hacia el desarrollo de robots con capacidades de auto-reparación (self-healing), lo que asegura procesos resilientes y autónomos. Estas alianzas no solo permiten acelerar la adopción de tecnologías innovadoras, sino que también promueven la investigación y la creación de nuevas soluciones que aseguren una transición laboral justa.
