“Me parece genial que existan este tipo de iniciativas para motivar no solo a que más mujeres aprendan respecto a ciberseguridad, sino para ayudarnos a entender el verdadero impacto que puede tener usar prácticas poco seguras”, asegura María Ignacia Sánchez, una de las ganadoras de SheSecure, la competencia internacional de ciberseguridad que se llevó a cabo por primera vez en Chile entre el 28 y 30 de marzo.
La actividad es una iniciativa que impulsa la Organización de los Estados Americanos (OEA) con el fin de contribuir a aumentar la participación de las mujeres en ciberseguridad. Comprometidos con este objetivo, el CSIRT de Gobierno colaboró en la realización de este evento para así motivar y generar espacios de aprendizaje y colaboración en las mujeres.
Michelle Bordachar, asesora jurídica y legislativa de la Coordinación Nacional de Ciberseguridad, dio la bienvenida a las participantes, enfatizando en que esta iniciativa “contribuye a disminuir la brecha de género en ciberseguridad y a promover la diversidad en esta industria, incentivando e inspirando mujeres y niñas a desarrollar sus habilidades técnicas y aprender más sobre este campo”. Y agregó que es necesario que “el Estado genere las condiciones para disminuir estas brechas, incentivando que una mayor cantidad de mujeres escoja estudiar carreras relacionadas con ciberseguridad y promoviendo un aumento de la participación femenina del sector, especialmente considerando que las mujeres representan un 52.4% de la población chilena”.
La competencia duró dos días y reunió a 41 equipos, siendo “Cyberia” compuesto por María Ignacia Sánchez y Constanza Villegas, “Rainbow Warrios” con Paola de la Vega y Gabriela Mayro, como integrantes; «Azuka Unap» de Bárbara Callejas y “Endémicas», conformado por María Jesús Pérez, estuvieron disputando los tres primeros lugares.
Finalmente, Cyberia tomó la delantera, coronándose como ganadoras del certamen con 325 puntos. El segundo lugar lo obtuvo “Rainbow Warrios” y el tercero “Azuka Unap”.
María Ignacia Sánchez aseguró: “La plataforma era intuitiva de utilizar y los desafíos estuvieron muy entretenidos. Creo que un detalle muy genial fue que pusieran un poco de historia de mujeres en el mundo de la programación, para aprender un poquito de eso en cada desafío. También me gustó poder colaborar en equipo porque hubo desafíos que no habría podido resolver sola y en los que me ayudó mucho la Coni”. Por su parte, Constanza Villegas, agregó, “me fue muy fácil usar la plataforma y también encontré muy ingenioso que se relatara una breve historia de mujeres en STEM en cada desafío. Por otro lado, también me gustó mucho el sistema de pistas para poder seguir avanzando cuando estábamos “pegadas” en algún tema. Por último, me acomoda mucho trabajar en equipo, porque además de colaborar, es un espacio para disfrutar el tiempo y aprender con amistades”.
Por último, Constanza invita “a todas las jóvenes (y no tan jóvenes como nosotras) a atreverse a participar de este tipo de actividades, que además son gratuitas, aunque no tengan conocimiento en ciertas áreas. A veces una no tiene mucha confianza en sus capacidades y cree que debe estudiar mucho o tener algún grado académico en ciertos temas, pero se aprende haciendo y mucho mejor aún si es con amigas que te apoyan en el camino”.
Fuente: TrendTic