Por Nicolás Deino Duran, Director Ejecutivo para la Industria Financiera de Accenture Chile
Trasladar sus funciones core a la nube es inevitable para la industria financiera. De acuerdo con un estudio reciente de Accenture, 82% de los ejecutivos de banca proyecta tener al menos la mitad de sus cargas de trabajo de mainframe en la nube dentro de 10 años, 31% de ellos ya han llegado a esa fase.
La creciente presión competitiva que traen nuevos competidores de la banca tradicional, como los bancos nativos digitales y competidores no bancarios entrando en el ámbito de los servicios financieros, hacen que el camino a la nube sea una urgencia para la banca. Estas empresas centradas en la tecnología están adoptando toda la funcionalidad de cloud, mejorando de forma importante sus productos y servicios, lo que crea mayores expectativas para los clientes. Los bancos pueden aprovechar la potencia de su transición a la nube para satisfacer esas expectativas en términos de velocidad y capacidad de respuesta.
Otra razón para que la industria traslade su core a cloud, es que las soluciones ya están listas para funcionar. Los proveedores de la nube pública y los de SaaS han resuelto muchos de los problemas de cumplimiento y riesgos, por lo que ahora los bancos están trasladando su core con mayor confianza. Además, la industria se ha visto motivada por el positivo impacto potencial de la nube. Ejecutar las cargas de trabajo core en cloud puede impulsar la rentabilidad, al reducir los costos de mantenimiento del mainframe y permitir a los colaboradores ser más innovadores en el desarrollo de nuevos productos.
Por otro lado, para que la industria maximice el valor de su migración a cloud es fundamental adaptar la cultura del banco. Esto puede suponer un gran reto, pero quienes lo consigan abrirán oportunidades increíbles. Para esto, hay 3 áreas que la banca requiere reforzar para maximizar su valor en la nube. En primer lugar, está en lograr colaboración desde el comienzo. El camino hacia cloud requiere de colaboración desde el primer momento, entre el negocio, los técnicos y las funciones de riesgo y cumplimiento. Crear equipos multifuncionales ayuda a romper los silos y a crear una asociación empresarial para la migración a Cloud.
En segundo lugar, es necesario que la industria incorpore una mentalidad innovadora. Es fundamental que la banca cuente con una mentalidad ágil, basada en el producto. Centrarse en una cultura de la innovación también puede elevar el nivel de energía entre los empleados al inyectar una actitud empresarial de «hacer que suceda» en el lugar de trabajo. Lo último puede hacer que la banca pase a ser una opción más atractiva para el personal de ingeniería altamente cualificado y otros grandes talentos. Además, a este punto hay que sumarle que el 50% de los empleados de banca está muy entusiasmado con la adquisición de conocimientos sobre la nube y el 52% cree que añadiría valor a su trabajo.
Por último, es fundamental la experiencia interfuncional. Una cultura que adopta el cambio y el crecimiento continuos es más eficaz, en el contexto tecnológico actual de rápida evolución, que otros lugares de trabajos tradicionales. Es necesario reforzar las competencias de las y los trabajadores para que estos dispongan de conocimientos interdisciplinarios que les permitan tomar decisiones mejor informados y con mayor rapidez, comunicarse claramente con otras áreas y comprender cómo añadir valor individual y colectivo en toda la empresa. Ofrecer a los colaboradores la oportunidad de aprender constantemente y poder ampliar sus habilidades, crea una cultura en la que se abren múltiples trayectorias profesionales.
Es necesario que la banca confíe en su viaje a la nube y traslade sus funciones core a cloud para que puedan obtener las ventajas que trae consigo esta migración. Además, quienes desarrollen una cultura de innovación y entusiasmo se verán altamente beneficiados en su migración a la nube. Con el cambio de cultura llegan múltiples oportunidades.