Fuente: La Tercera
Manuel y Víctor comenzaron asesorando a las pequeñas empresas en sus problemas contables. Ahí descubrieron un gran dolor y vieron una oportunidad. Con la “simpleza” como su mantra, esta empresa proyecta facturar US$ 2,5 millones en 2022 y ya da sus primeros pasos hacia el extranjero.
Ambos eran veinteañeros y contadores auditores. Corrían los primeros años de la segunda década del siglo XXI mientras Manuel Concha (en la fotografía) y Víctor Jiménez se dedicaban a realizar asesorías contables, financieras y tributarias a pequeñas empresas, área donde había una competencia monstruosa. “Pero buscando la diferenciación les dijimos a nuestros clientes que les ayudaríamos con sus sistemas informáticos. Daba lo mismo cuál. Desde un Excel hasta sofisticados ERP (software empresarial) que podían costar muchos millones de pesos”, recuerda Concha.
Siempre se sintieron diferentes. Y el fundador de la startup Kame ERP asegura que hasta el día de hoy ese es su sello. “El sector de las fintech y startups está por lo general asociado al mundo ABC1. Pero nosotros provenimos de un contexto muy humilde. Ambos fuimos los primeros profesionales de nuestras familias y nuestras madres fueron asesoras de hogar. Nosotros mismos pagamos los últimos años de colegio, el pregrado y el posgrado. El esfuerzo, la meritocracia y saber cuánto cuestan las cosas, son circunstancias de la vida que sin saberlo, nos han unido”, dice Concha. Hoy Kame tiene 7.300 empresas en su portafolio, proyecta facturar US$ 2,5 millones en 2022 y ya comenzaron su incursión hacia el extranjero.
Pero volvamos al inicio del emprendimiento. Cuando realizaban las asesorías captaron que las pymes estaban bastante “botadas” desde el punto de vista tecnológico y, por otro lado, los precios de los software de contabilidad no estaban al alcance de sus billeteras. Llamaron a la ingeniera informática Ximena Adrian para unir fuerzas y a fines del 2016 lanzaron su startup. “Desarrollamos una aplicación muy simple pensada para la pyme y que en dos horas se pueda instalar. Con la expertise que teníamos, vimos un nicho abandonado y lo tomamos. Además, desde que partimos establecimos que no venderíamos un producto, sino un servicio”, explica el cofundador de Kame, cuyo nombre viene del fanatismo de Jiménez por Dragon Ball Z. Kame Hame Ha es una técnica de combate de esta serie de anime japonesa. Una analogía a la simplicidad de su oferta a las pymes. “Hoy nuestro promedio de respuesta es de cinco minutos”, asegura Concha.
Básicamente, Kame es un ERP que funciona 100% bajo cloud computing y que por 12 UF por usuario al año, una empresa puede gestionar varios elementos como compras, factura electrónica, recursos humanos, finanzas y ventas. La simpleza y su bajo costo es lo que -según sus fundadores- los diferencia de la gran oferta de ERP y software empresariales que existen. Y por supuesto, la declaración de principios de seguir manteniéndose en el segmento pyme, como aclara rápidamente Concha, ante la mirada de “¿no es más de lo mismo?” “Nuestro core business está en la transversalidad de llegar a todas las pequeñas y medianas empresas que necesitan saber y solucionar temas básicos”, insiste.
“No partimos con capitales de terceros. Ni siquiera del nuestro. Al principio trabajábamos después del horario de nuestra consultora y los fines de semanas. Fue bien duro, pero al año de vida recibimos ingresos”, cuenta Concha y agrega: “De a poco, los clientes renovaban y comenzamos a crecer al doble año a año”. El 2018 entró un cuarto socio: el ingeniero informático Rodrigo Cortés. Hasta que un día recibieron la llamada de uno de sus clientes: el Grupo M&A, un holding chileno fundado por los empresarios Gonzalo Martino Baldwin y Cristóbal Alonso Benavente, que posee negocios en varios rubros como retail, logística, producción rental e… inversiones en capital semilla. Querían ser parte de esta startup. Cuento corto, en 2022 M&A compra el 33% de Kame inyectándoles una inversión (paulatina hasta el 2025) de $ 7.000 millones, con lo que, además de darles más espaldas, les permitirá una proyección a los países donde está este grupo de empresas, aparte de Chile: Perú, Colombia, Panamá, México y Estados Unidos.
Concha insiste que el éxito de esta startup -que el 2021 facturó US$ 1,2 millones- está dada por una visión más humana a las pequeñas y medianas empresas. “Nos hemos dedicado mucho a generar conocimiento”, apunta. Escribieron un libro para las pymes, hicieron un manual y hace poco lanzaron el programa “Aprende y Emprende” que se transmite por YouTube y es conducido por el ingeniero comercial Giancarlo Barbagelata y el mismo Manuel Concha. Por sus capítulos han pasado Nicolás Larraín, Tomas Cox, Iván Martínez y Ricardo Ibáñez, entre otros conocidos del mundo de los negocios.
Ya tienen tres clientes en Perú y el 2023 proyectan entrar a Colombia. “Kame ERP se va a expandir a varios países de Latinoamérica. Esperamos tener un éxito similar al de Chile”, remata Concha, con la misma seguridad con la que, probablemente, asesoraba a sus primeros clientes cuando tenía veintitantos.
