Fuente: Forbes Colombia
El fundador y CEO Santiago Suárez encabezó el recaudo. Aquí la explicación de por qué poderosos inversionistas de Silicon Valley estaban ansiosos por respaldar a la fintech con sede en Bogotá.
Cuando el CEO de Addi, Santiago Suárez, decidió que estaba listo para recaudar una nueva ronda de inversión, no había indicios de una recesión global. Ahora, en medio de la turbulencia del Covid-19, tras atraer más recursos a su operación, se sienten preparados no solo para respaldar el financiamiento a consumidores en comercios, con créditos que aprueban en menos de cuatro minutos, sino para abrir operaciones en los más grandes mercados de América Latina.
La compañía basada en Bogotá, anunció este jueves que recaudó US$15 millones en una ronda de inversión encabezada por Quona Capital, que tiene en su portafolio a otras fintech latinas como Konfío y Créditas; Foundation Capital, que ha invertido en LendingClub y Rappi, y S7 Ventures. Los prestigiosos fondos Andreessen Horowitz y Monashees ratificaron su interés con nuevos aportes, para un consolidado de US$31 millones en el capital de riesgo obtenido.
La valoración de la empresa no fue revelada, pero con este registro, Addi se convierte en la fintech colombiana que más capital de riesgo ha recibido.
La nueva ronda le da a Addi los recursos suficientes para seguir otorgando créditos en punto de venta, aumentar su capacidad digital y mejorar su desarrollo de producto. Pero con este soporte, Addi planea expandirse -si la pandemia lo permite- antes que acabe el año a Brasil y México, sumando más talento a su equipo, que en la actualidad son 75 personas, repartidas entre la capital colombiana, Medellín, Cali, Barranquilla y Londres, dijo a Forbes su CEO Santiago Suárez.
“Somos conscientes que vienen meses difíciles, pero en el largo plazo vemos la oportunidad muy grande”, expresó Suárez, quien antes de fundar Addi, fue vicepresidente de estrategia de la fintech norteamericana LendingClub, líder del equipo global de innovación de J.P. Morgan en Nueva York y Londres, así como socio de la aceleradora Y Combinator de Silicon Valley. “Nosotros tenemos un nuevo aliado que nos dijo que en abril logró las ventas en línea que esperaba para el 2026. La oportunidad está en que en nuestros países tenemos la costumbre de financiar y el sistema es más restrictivo”.
Fundada en 2018, Addi ha estado entregando créditos al momento del pago de un producto o servicio y ha consolidado una lista de aliados que incluye tiendas de ropa, insumos o electrodomésticos como Koaj, Corona, Pintuco y Haceb. La firma funciona con un servicio que le apunta a la omnicanalidad, tratando de garantizar la misma oportunidad para quienes compran en puntos físicos o desde el comercio electrónico.
“Es algo que le permite comprar lo que usted sueña y necesita pagar a plazos”, describe Suárez sobre Addi, que afirma haber colocado cerca de $100.000 millones en créditos a más de 70.000 clientes.
La manera en que Addi es diferente a jugadores establecidos en el mercado como Brilla -un vehículo de financiamiento que tienen varias distribuidoras de gas-, comienza por su plataforma, que es la única de su tipo en el mercado local. Para el caso de las compras en línea, que se han disparado en medio del bloqueo Covid-19, Addi funciona como un botón de pago. Desde enero este año, hicieron una integración con V-Tex que les permite ofrecer un ‘onboarding’ inmediato a comercios que usen esa plataforma para vender.
Cuando el consumidor está en una tienda física, el vendedor tiene acceso a un software en el que registra la cédula, el correo electrónico y el celular, que son datos “suficientes” para el análisis de riesgo crediticio que Addi hace en menos de cuatro minutos. Vía Whatsapp envía la oferta, el contrato y cierra la transacción del pago. En total, dicen tener presencia en 1.200 tiendas de 85 municipios de Colombia.
“El cliente solo necesita Whatsapp, porque por ahí hacemos la cobranza y el cierre del contrato. Estamos trabajando en cómo ser más rápidos, pero en el primer trimestre el 25% de nuestros clientes fueron reincidentes”, comenta el CEO de Addi. En la experiencia, los pagos de los créditos, que llegan hasta montos de $20 millones, se hacen en distintos plazos a través de internet, pero también en sucursales o corresponsales bancarios y cajeros.
Como alivio a la emergencia económica del Covid-19, Addi eliminó los cobros de intereses de mora y gastos de cobranza, e indica haber apoyado a más de 600 familias de los vendedores de comercios aliados. Aquellos clientes que han visto una disminución en su ingreso podrán bajar la cuota hasta solo el interés, sin ninguna penalidad hasta por 90 días. A quienes han perdido su ingreso, Addi dijo que les permitirá aplazar tres cuotas sin penalidad.
A pesar de la incertidumbre global, de continuar la senda correcta, Addi podría seguir los pasos de poderosas fintech del mundo que funcionan con modelos similares, como Afterpay y Klarna. Entre tanto, el ecosistema fintech de Colombia se mantiene como el tercero más grande de América Latina, con un incremento de 26% en nuevas compañías de este tipo en el último año, que según el Fintech Radar de Finnovista, están generando más de 7.000 empleos.