Fuente: www.expansion.com
Revolut, Monzo, Starling, Atom y TransferWise forman parte de una nueva generación de negocios financieros que operan exclusivamente a través del móvil y se han hecho indispensables para los jóvenes británicos.
En Londres, empieza a ser raro ver a un Millennial pagar un flat white, el café de moda en la ciudad, con una tarjeta de un banco tradicional como Santander, HSBC o Lloyds. Basta prestar un poco de atención en cualquier cafetería para ver que los jóvenes sacan tarjetas de bancos desconocidos (para sus padres), como Revolut, Monzo, Atom o Starling.
Todos ellos forman parte de una nueva saga de bancos digitales que está creciendo a pasos agigantados en Reino Unido y que muchos ven a medio plazo como un serio competidor de los bancos tradicionales. Todavía tienen servicios muy limitados -por lo general sólo ofrecen tarjetas de débito, cuentas corrientes y préstamos personales-, pero están recibiendo el apoyo de los grandes fondos de capital riesgo para expandir sus negocios y, sobre todo, llegar a nuevos mercados.
El mayor atractivo de estos bancos es su aplicación móvil, que permite controlar las finanzas personales de forma intuitiva y muy gráfica. También ha sido decisiva su imagen de negocio cool y fresca, alejada de los escándalos de la banca tradicional tras la crisis financiera. Por último, la ausencia de comisiones a la hora de enviar transferencias a otros países o de pagar en moneda local cuando se viaja ha atraído a muchos hombres y mujeres de negocios, incluso sin ser jóvenes Millennials.
Como inconveniente, estos nuevos bancos no tienen sucursales -algo que a los más jóvenes no les importa porque todo lo hacen online-, y les falta todavía pasar la gran prueba: demostrar que son negocios viables y con garantías como los grandes bancos.
COMIENZOS
Varios de estos negocios comenzaron como proyectos de emprendedores cansados de ver las altas comisiones que cobraban los bancos a la hora de transferir dinero (es el caso de la empresa especializada en divisas TransferWise o del banco Revolut). Pero todos se han beneficiado de una regulación más laxa por parte de la UE, que ha permitido ampliar la competencia y obtener de forma más sencilla la licencia bancaria para operar.
Aquí también ha habido varias estrategias. Algunos nuevos bancos optaron por pedir la licencia bancaria y no empezar su actividad hasta conseguirla, dos años después. Es el caso de Atom (participado por BBVA), Starling y Tamdem. Otros prefirieron lanzar el negocio, aún sin licencia, con servicios más modestos, como las tarjetas pre pago. Fue el caso de Monzo y el banco alemán N26.
El más agresivo ha sido Revolut, que en lugar de esperar, pidió una licencia de e-money y empezó a operar con tipos de cambio. Hoy, Revolut, que aplica una agresiva estrategia de márketing, es el banco que más crece, con 10.000 nuevos clientes al día.
OAKNORTH
El último ejemplo de la fortaleza que está adquiriendo este tipo de empresas se vio la semana pasada cuando OakNorth, un banco británico que da crédito a pymes, se convirtió en la fintech más valorada del país tras la inyección de 400 millones de dólares por parte del fondo japonés Softbank Vision Fund. Esta aportación permitió valorar la firma en 2.800 millones de dólares, todo un récord. OakNorth fue el primer banco digital británico en ganar dinero, la asignatura pendiente de casi todo el sector.
La compañía, que obtuvo su licencia bancaria en 2015 y está dirigida por el fundador Rishi Khosla, ganó 10,6 millones de libras en 2018. El año pasado, la operación récord en Reino Unido estuvo protagonizada por TransferWise, que recibió una inversión de 280 millones de dólares y que también gana dinero (7,8 millones de libras en su último ejercicio).
Reino Unido lidera el sector ‘fintech’ europeo, al canalizar más de la mitad de lo invertido en 2018
Todos los demás proyectos están todavía en pérdidas, aunque esto de momento no preocupa a los inversores, más centrados en que estas empresas den el salto exterior. De momento, solo Revolut ha abierto oficina en España, donde cuenta ya con miles de clientes. Otro gran banco digital que ha anunciado planes para España es el alemán N26, otra fintech que se lanzó hace tres años y tiene una valoración actual de 2.700 millones de dólares. Su objetivo es captar 100.000 clientes en España.
El sector fintech británico se ha convertido en uno de los motores de crecimiento de la economía en Reino Unido, en un momento de gran incertidumbre por culpa del Brexit. En 2018, los nuevos bancos y otros proyectos relacionados con el mundo financiero levantaron 3.900 millones de dólares, un 56% más que el año anterior. El mercado británico canaliza ya más de la mitad de todas las inversiones europeas en el sector fintech, por delante de Alemania y a larga distancia de España (28 millones de dólares en 2018).
El impulso de este sector en Reino Unido no es casual y en parte se debe a los esfuerzos de las autoridades bancarias por fomentar la competencia tras la crisis de 2007, que estuvo a punto de acabar con varios bancos y obligó la nacionalización de RBS y Lloys, entre otros. «El papel de Londres como capital de Europa es indiscutible», explica Richard Lumb, jefe de servicios financieros de Accenture. «La nueva regulación e iniciativas como el Open Banking han creado nuevas oportunidades en esta ciudad», añade.
REVOLUT: Los chicos malos del sector
Revolut es uno de los mejores ejemplos del éxito que están teniendo en Reino Unido los nuevos bancos digitales. Según datos de la compañía, la aplicación de móvil logra 10.000 nuevos clientes al día, lo que supone en estos momentos cuatro millones de clientes en todo el mundo, que gastan 3.900 millones de libras a través de sus servicios.
El año pasado, la compañía levantó 250 millones de libras de capital para financiar su expansión internacional, lo que supone valorar la firma en 1.700 millones de libras. Los fundadores de Revolut son el ruso Nicolay Storonsky, ex broker de Credit Suisse, y Vlad Yatsenko, experto en tecnología. Juntos quieren cambiar la forma de operar en banca. «Los grandes bancos sólo promocionan a incompetentes», aseguró Storonsky a EXPANSIÓN hace unos meses.
ATOM BANK: El brazo digital de BBVA
Atom es un banco británico que cuenta con BBVA como principal accionista. El banco español tiene un 39% por ciento de las acciones, tras acudir a varias de las ampliaciones de capital realizadas por la fintech. Antes de abril, BBVA tiene que decidir si lanza una opa y se hace con el 100% de Atom, o prepara una salida a Bolsa y vende su parte.
Atom Bank nació en 2014 en Durham, al norte de Inglaterra, y fue lanzado en 2016. Aunque sólo opera a través de la aplicación móvil, es lo más parecido a un banco tradicional y permite abrir una cuenta corriente en 10 minutos. Actualmente cuenta con 1.400 millones en depósitos y 1.200 millones en préstamos a pequeñas empresas y particulares. En el último ejercicio, Atom perdió 53 millones de libras, «en línea con lo esperado», según el banco.
MONZO: La tarjeta de moda en Londres
Caracterizado por unas vistosas tarjetas de color coral, Monzo es uno de los nuevos bancos digitales de éxito en Reino Unido. Fue lanzado en 2015 por varios emprendedores procedentes de Starling Bank, y está dirigida por Tom Blomfield, de 33 años.
La empresa nació como aplicación móvil con una tarjeta de prepago, pero desde 2017 cuenta con licencia bancaria del Banco de Inglaterra y ofrece a sus usuarios la posibilidad de tener una cuenta corriente. Aunque en principio es un banco centrado en el cliente final, ha empezado a dar servicio a empresas. El pasado mes de octubre, Monzo levantó 85 millones de dólares por parte de inversores privados, lo que permitió valorar la empresa en 1.000 millones de dólares. La compañía perdió 33 millones de libras en 2017 y tiene 1,5 millones de clientes.
TRANSFERWISE: El éxito del tipo de cambio justo
En 2007, el estonio Kristo Käärmann envió una transferencia que le cambiaría la vida. Al darse cuenta de las comisiones desorbitadas y el mal tipo de cambio que le ofrecía su banco, decidió montar TransferWise con su amigo Taavet Hinrikus. La empresa nació en 2011 y se ha convertido en uno de los proyectos más exitosos del panorama fintech en Reino Unido.
TransferWise gestiona transferencias por más de 3.000 millones de libras para sus 4 millones de clientes en 57 países. La firma dice que ha ahorrado 27 millones de euros en comisiones a los usuarios españoles. El Banco Mundial dice que el coste medio de una transferencia de divisas es del 7,13%, mientras que TransferWise cobra menos del 1%. En su último ejercicio, la firma ganó 6,2 millones de libras y está valorada en 1.300 millones.
STARLING: El único banco liderado por una mujer
Starling Bank nació hace cinco años y es una aplicación bancaria que funciona a través del móvil. Sus usuarios pueden abrir una cuenta corriente que les permite tener una tarjeta MasterCard de débito. Como no tiene cajeros, la compañía tiene un acuerdo con el Royal Mail (el Correos británico) para que sus usuarios puedan sacar dinero en más de 11.500 oficinas.
Su última ronda de financiación llegó el pasado mes de abril, cuando logró levantar 10 millones de libras. En total, la compañía ha recibido desde su nacimiento 68 millones de libras para su expansión. El banco está liderado por Anne Boden, su fundadora, que antes trabajó en Allied Irish y RBS. Starling cuenta con cerca de 350.000 clientes, tanto personales como empresas y no carga comisiones al hacer pagos en el extranjero.