Fuente: Diario Pulso
La disconformidad que expresara Cruz Verde en los cobros de comisiones por parte de Transbank ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia ha dado pie a un cuestionamiento a la regulación de la firma financiera.
A través de un informe, la Fiscalía Nacional Económica (FNE) cuestionó la gestión de la compañía encargada de la administración de las tarjetas de crédito y débito bancarias del país. Para la entidad persecutoria su autorregulación y los fundamentos de su creación, junto a la estructura de descuentos que aplica a empresas del comercio, deben ser revisados por el tribunal.
Más claro aún. En su exposición, la FNE afirmó que ‘las distorsiones e ineficiencias que actualmente está produciendo el Plan de Autorregulación de Transbank, al estar asociada a medios de pago cada vez más utilizados, se expanden por todo el sistema económico, con efectos negativos para la libre competencia’.
‘A diez años de su origen, es imprescindible revisar los supuestos económicos considerados al aprobarlo, pues ya no cuenta con justificación alguna’, remató la entidad antimonopolio.
La Fiscalía concluyó que atendidas las condiciones actuales del mercado, el Plan de Autorregulación vigente de la compañía ‘no cumple con los objetivos que originalmente se tuvieron en consideración para su aprobación, en el año 2006, pues Transbank ya no cuenta con las características de un monopolio natural’.
Por ende, tampoco se mantendría el nivel de las tarifas máximas fijadas en esa oportunidad, ya que no generan una restricción efectiva, aclaró el organismo liderado por el fiscal Felipe Irarrázabal.
En efecto, la nueva regulación tarifaria propuesta por la FNE al TDLC sostiene que se deben considerar los costos en que incurre la empresa por servir a cada tipo de cliente. Por tanto, las diferencias tarifarias entre, por ejemplo, distintos rubros, tendrían estar sólidamente justificadas desde el punto de vista de los costos que genera la atención a cada cliente.
Para la FNE, ‘aún es necesario mantener limitaciones al comportamiento monopólico de Transbank y de los bancos emisores que actúan conjuntamente a través de esta empresa, hasta que se logren condiciones de competencia efectivas en este mercado’.
El proceso de consulta abierto en el TDLC también recibió los comentarios de Cencosud. La firma, advirtió al Tribunal que para la operación de los distintos comercios minoristas los servicios que presta Transbank resultan indispensable.
Así, aseguraron que el uso de tarjetas de débito y crédito de aceptación universal por medio del sistema Transbank en los locales operados por Cencosud son un muy importante medio de pago y alcanzan parte significativa del total de sus ventas en comparación con otros como el efectivo, cheque u otros.
Mientras que SMU sociedad que consolida las operaciones del brazo de retail de supermercados del grupo Saieh, discrepó de la posición expuesta por Cencosud. ‘El sistema de determinación de los precios que cobra Transbank a los establecimientos comerciales, tiene potenciales efectos exclusorios’, sostuvo el holding a cargo de las cadenas Unimarc y Construmart.
En tanto, la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (SBIF), sostuvo que las condiciones comerciales asociadas a las tarifas cobradas por la empresa Transbank por sus servicios ‘resultan acordes con la normativa que regula la libre competencia en los mercados’. Así, agregó que ‘no cuenta con antecedentes que aportar sobre la materia’.
Recuadro :
¿Qué pasó? La Fiscalía Nacional Económica insiste en efectuar cambios al modelo de autorregulación de Transbank por sus cobros a los comercios.
¿Por qué pasó? Cruz Verde presentó una consulta no contenciosa ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia, debido a los cobros que efectúa Transbank por sus servicios.
Montos. En 2016, las transacciones con tarjeta de crédito sumaron unas 262 millones operaciones.
Según cifras de la SBIF, el número de tarjetas de crédito vigentes pasó de más de cuatro millones en 2006 a casi 13 millones en 2016.
CRÍTICAS DE LA FNE
«Pese a que Transbank ha rebajado su tarifa máxima en las operaciones con tarjetas de débito, esto no ha representado una baja relevante en la tarifa promedio».
«Transbank no es un monopolio natural. Esto ha sido manifestado por la Fiscalía ante el TDLC. (…) Las tarifas cobradas por Transbank a los comercios a todas luces parecen excesivas y sin fundante económico».
«La actual estructura tarifaría debe cambiar a una estructura de autorregulación, avanzando hacia una tarificación con una tasa de intercambio explícita y en base a los costos».
