Fuente: Diario Pulso
Sin duda el bitcoin ha sido un tema de conversación en el mundo financiero y no sólo por ser la divisa que más se apreció en 2016, duplicando el alza que ha mostrado el real brasileño (divisa física que más se ha fortalecido respecto al dólar el año pasado). El bitcoin es una moneda virtual, donde no existe un respaldo físico ni un banco central asociado. Tampoco existe un país asociado con dicha moneda, situación que impide un mayor control de la moneda, siendo la oferta y demanda en su estado más puro el que determina el precio de esta “criptomoneda”.
Esta moneda digital llega como una solución a los mayores cobros y riesgos de pagos electrónicos, ya que uno de sus fundamentos principales es ser descentralizada al no estar respaldada por ningún banco central, gobierno o empresa privada, como mencionaba al comienzo. Cada vez son más las compañías que aceptan pagos con bitcoin, lo que debería ser una tendencia más generalizada con el paso de los años. Dentro de las principales marcas que aceptan esta moneda digital, encontramos a Microsoft, Dell, Wordperss, Reddit, Expedia, etcétera, habiendo cada vez más empresas interesadas en aceptar este medio de pago.
Uno de los factores que ha impedido una mayor inversión en el bitcoin es la cantidad de interrogantes que existen en torno al funcionamiento de esta moneda: ¿cómo obtenerla?, ¿cómo se controla la demanda?, ¿cómo se regula el correcto funcionamiento de este mercado? Pese a que todas estas respuestas están y pueden ser un tanto complejas de explicar a las personas que no tienen un acabado conocimiento de la informática, las mismas preguntas aparecían hace algunos años cuando comenzó el “boom” de las ventas por internet, y hoy día en el retail cada vez se compra más de manera online y menos a través de compra presencial.
A su vez, la alternativa del bitcoin ha venido cobrando fuerza ya que las comisiones relacionadas con su uso para comprar bienes o servicios son prácticamente inexistentes respecto a las del mercado tradicional. Adicionalmente, su complejo sistema criptográfico hace imposible su duplicación o falsificación.
Pasando a temas de inversión, hoy la moneda virtual aparece como una alternativa cada vez más atractiva de cara a este 2017, donde la mayoría de las divisas se están viendo afectadas por la subida de tasas de interés, mientras que el bitcoin marca un nuevo máximo anual, cotizando en niveles no vistos desde el año 2014. A su vez, la “criptomoneda” ha funcionado como un refugio ante escenarios de incertidumbre que suelen tener como consecuencia una caída en el valor de las monedas respecto del dólar. Como ejemplo, podemos tomar el Brexit, donde la moneda subió más de 20% en dos semanas.
De esta forma, ante la creciente popularidad de esta moneda y su mayor aceptación en el mundo, donde tanto consumidores como empresas ya están aceptándola como medio de intercambio, esperamos una subida hasta los US$850, que implica una apreciación cercana al 10% en un año 2017 que estará lleno de incertidumbres, ante la Presidencia de Donald Trump y varias elecciones que se vivirán en Europa.
Por Samuel Levy, jefe departamento de estudios de Capitaria.
