SANTIAGO.- El auge de la tecnología móvil ha hecho que Chile sea uno de los países que más adopta los servicios basados en el uso de teléfonos. Según los últimos datos de la Subsecretaría de Telecomunicaciones, la telefonía móvil alcanza una penetración en el país de 129,5%, es decir, más de 23 millones de líneas.
Una de los desarrollos más interesantes producidos por esta «explosión» es el de la mensajería, primero dominada por el mensaje de texto (SMS) y luego por servicios basados en datos, como el popular WhatsApp y otras alternativas como Facebook Messenger o Hangouts.
¿Cuál es el estado de esta «batalla»? Según una reciente encuesta del ConsumerLab de Ericsson, un 84% de los chilenos dice usar frecuentemente WhatsApp, quedando sobre el promedio mundial de 40%. El mismo estudio nos deja bajo el promedio mundial de SMS, con 32% frente a un 44%.
La Subsecretaría de Telecomunicaciones fija el cuarto trimestre de 2012 como el punto máximo del uso de la mensajería de texto, llegando a 562 de SMS y MMS enviados en ese periodo. El último dato, del segundo trimestre de 2015, habla de 322 millones de mensajes.
¿Se puede revertir esta tendencia? Según Diana Moya, directora del ConsumerLab de Ericsson para Latinoamérica, el surgimiento de los planes de telefonía con «SMS ilimitados» podría ayudar. «El empaquetamiento de SMS ilimitados puede significar un ahorro en datos para el usuario, dado que su uso no se descuenta de los tan apreciados bytes de datos», aunque agrega: «el costo no es el único motivador. WhatsApp está ganando adeptos debido a funcionalidades como compartir fotos, videos, enviar mensajes de voz, realizar llamadas», entre otras.
Pero, asegura, el mensaje de texto tiene sus ventajas. Primero, es ofrecido directamente por las empresas de telecomunicaciones. «Puede ser garantizado y soportado directamente por el operador, mientras que otros servicios corren por sus redes pero el operador no es directamente responsable», explica.
En segundo lugar, el SMS no requiere un plan de datos. Así, si hay señal, hay mensajes de texto. Finalmente, el uso de datos de internet 3G o 4G puede representar una alternativa bastante más cara durante viajes.
Medios de publicidad
Otra área de crecimiento para los servicios de mensajería, en particular el SMS es la de la publicidad. Desde operadores telefónicos a bancos, muchas empresas están usando el mensaje de texto como una manera de realizar «fidelización» de sus actuales clientes y también una forma de captar otros nuevos.
Pese al descenso en su uso, «el SMS sigue siendo una vía válida para contactar a los clientes; siempre y cuando el contenido sea relevante para él», dice Sergio Gamboa, director de la Escuela de Publicidad de la Universidad del Desarrollo.
La razón es simple: si tiene señal, todo teléfono móvil recibe estos mensajes. «El SMS lo puedo ver cualquier teléfono celular, incluso en los más básicos», agrega Gamboa.
Respecto al uso de plataformas de datos al estilo de WhatsApp para estos fines, Gamboa indica que en Chile hay historial. Una marca de jeans realizó una campaña de este tipo, «pero su uso fue muy puntual porque aquí las reglas son distintas. Si el receptor no tiene intenciones de contactarse conmigo, me puede bloquear para siempre».
En este caso, y para ambas tecnologías, Diana Moya indica que un contacto publicitario vía mensajería tiene que apelar a un interés claro del receptor. «El usuario debe percibir claramente el beneficio de la publicidad, es decir, esta tiene que ser personalizada y relevante para el usuario, no intrusiva, y moderada para que funcione», afirma.
Quienes sienten que la publicidad en SMS (y llamadas telefónicas) es invasiva pueden usar el servicio «No Molestar», disponible en el sitio del Sernac, donde se puede registrar el teléfono para evitar recibir futuros contactos.