Con startups tecnológicas jugando un lugar integral en el futuro de la banca, la innovación en el frente legal puede ayudar a desbloquear oportunidades.
En un juego de asociación de palabras, es probable que “banco” e “innovación” no sean la pareja que se nos viene a la mente. Sin embargo, si tenemos en cuenta la evolución de los medios de pago digitales, aplicaciones de banca online, móviles y la automatización de las interacciones de las sucursales, el sector bancario se ha enriquecido de innovación estos últimos años.
Cuando me uní a Barclays después de más de 10 años con una compañía de soluciones innovadoras fintech, de inmediato me llamó la atención las fuertes capacidades del diseño propio y de los equipos digitales, y como nuestra estrategia nos estaba llevando a relaciones de colaboración con socios no tradicionales de innovación. Ahí radica uno de los retos esenciales para el equipo legal en la facilitación de estrategias de innovación: ¿cómo pueden convivir contratos grandes y pequeños, regulados y no regulados, riesgosos y no riesgosos, todo esto considerando las distintas restricciones legales pero que al mismo tiempo permita acceder y aprovechar las oportunidades que entrega la innovación?
Antes de considerar el enfoque legal, deberíamos reconocer los beneficios de invertir en la comunidad de la innovación para obtener una comprensión más profunda de las formas de trabajar de los posibles socios. Barclays ha estado activo en esta área, presentando el evento Open Innovation en octubre de 2013 y más recientemente lanzando un programa acelerador de 13 semanas con Techstars en Whitechapel. No estamos solos en este espacio, estamos con muchos otros bancos que ha lanzado recientemente programas aceleradores.
Habiendo establecido la relación, debemos ser cuidadosos para que el proceso legal no rompa lo mejor del tema, mientras que también se reconoce que las obligaciones del banco con los clientes, titulares de tarjetas, consumidores y reguladores deben ser logradas. Entonces, ¿qué consideraciones y herramientas claves deben ser empleadas en el enfoque contractual de asociaciones para la innovación?
Pregunta, no lo digas
En la fase pre-contractual, arma a tus hombres de negocios con un checklist de preguntas claves que los ayudará a estructurar la relación legal y fijar expectativas entorno a fundamentos como la propiedad intelectual (IP). Como su activo principal, IP será un foco importante para los posibles socios.
Invierte en la educación
Grandes instituciones pueden ser confusas y difíciles de navegar; entidades de servicios financieros regulados aún más. No podemos ignorar cosas como la privacidad de datos, el lavado de dinero y el cumplimiento normativo sólo porque tenemos un socio más pequeño, pero podemos establecer las expectativas temprano, explicar nuestros desafíos y guiarlos a través de las, a menudo, complejas interacciones con los especialistas de nuestra organización. Por otra parte, asegurando que su personal esté plenamente familiarizado con el modelo de contratación también ahorrará tiempo y evitará errores costosos.
Control por diseño
Considera el valor de enmarcar las interacciones iniciales bajo un dispositivo contractual más ligero, como una prueba de concepto o convenio de colaboración, lo cual marca barreras de control y un ambiente seguro donde las lluvias de ideas y experimentos puedan florecer. La asociación así no puede progresar más allá de este punto, por lo que el trabajo en un contrato de servicio completo pesado sería desperdiciado en cualquier caso. Este enfoque bien puede requerir una inversión inicial en su conjunto de plantillas contractuales pero los beneficios deben superar los costos.
No dejes que la cola lleve al perro
La colaboración con socios de innovación exige un mayor apetito por el riesgo por parte de la empresa: una vez que se ha tomado esta decisión estratégica, el apetito por el riesgo y la naturaleza específica de los productos o servicios que se ofrecen deben conducir el diseño de los contratos, no al revés. No siempre es posible confiar en la protección del papel de las indemnizaciones contractuales (que puede implicar poca perspectiva práctica de recuperación) a fin de considerar las medidas operativas para mitigar riesgos y seguros para cubrir las responsabilidades.
La industria de servicios financieros puede ser un espacio atractivo para las empresas de tecnología y tienen una papel integral para jugar en el futuro de la banca. Un poco de innovación en el frente legal puede recorrer un largo camino.
Rob Dinning, Consejero general de operaciones y tecnología de Barclays.
Fuente: The Guardian