Ya hemos hablado en otras ocasiones de ciertas tendencias relacionadas con el móvil que afectan a la venta más tradicional. No obstante, hoy nos focalizamos en el comercio móvil, una realidad ya palpable tanto en países pioneros como Estados Unidos, y en otros menos desarrollados comercialmente como España.
Los móviles en las tiendas han llegado para quedarse. El showrooming está más que presente pero más allá de buscar, comparar o sacar fotografías a productos en los establecimientos fijos, los usuarios empiezan a comprar directamente a través de sus smartphones.
Si bien es cierto que en España todavía no es la principal vía de venta, en 2012 el comercio móvil ingresó 2.500 millones de euros, según Online Business School. Todo ello gracias a un 6% de los consumidores que se atrevieron a hacer compras desde sus terminales. Un porcentaje de usuarios todavía lejano del 30% de Estados Unidos o 43% de Corea del Sur pero que va aumentando año a año.
De hecho, si miramos las cifras de ventas de gigantes en Estados Unidos vemos que poco a poco la distancia entre las ventas a través de ordenadores y móviles se van acercando. Si vemos las cifras del gráfico, la conclusión es clara: Amazon, eBay o Walmart tienen más usuarios comprando a través de móviles o móviles y ordenadores que compradores on-line tradicionales (solo sobremesa).
¿Qué favorece el comercio móvil?
Algunas investigaciones como II Estudio sobre el Comercio Móvil en España 2013 de MMA señalan que las ofertas son una de las principales razones por las que se hacen compras móviles en España. En el otro sentido, muchos usuarios españoles alegan desconfianza e incapacidad tecnológica del móvil para no comprar por este método. Unos argumentos que se parecen mucho a los que todavía podemos ver entre los detractores del comercio electrónico. Comercio móvil, sí; pago móvil, no.
Así como vemos que el comercio móvil va ganando terreno, lo cierto es que los pagos a través del mismo dispositivo no terminan de cuajar en nuestro país.
La tecnología NFC, los diferentes servicios de pago móvil o las alianzas de bancos y operadoras no terminan de engatusar a los compradores. De hecho, el estudio de la MMA revela que 80,1% de los usuarios no ha pagado nunca con su smartphone.
De los que sí lo han hecho -menos de un 20%-, la mayor parte utilizaron los datos de su tarjeta pre-instalados en el móvil. Proceso de adaptación Aunque como comentábamos al inicio, todavía el comercio móvil no es la vía principal de compra en España, lo cierto es que va ganando peso.
Todavía estamos en una fase de adaptación en la que muchos compradores comienzan a introducirse en las aplicaciones móviles y poco a poco, descubren la versatilidad de los dispositivos móviles. Quizás por ello, algunas tiendas físicas y on-line ya cuentan con sus propias aplicaciones y páginas webs adaptadas a los smartphones y tablets.
Apps donde no solo se puede comprar sino también se pueden geolocalizar tiendas, aplicar descuentos o encontrar información adicional. Todo lo imprescindible para una tienda del futuro. Sin embargo, queda mucho camino por recorrer. Tanto es así, que la adaptación no solo tiene que venir de parte de los consumidores sino también de los propios vendedores. ¿Estás preparado para el comercio móvil.
Fuente: muycanal.com
